Al dar inicio la década de los años 80, el surgimiento del new wave determinó una nueva forma de escuchar rock al aplicar las propuestas musicales de este género, donde se aprecia la calidad de algunos grupos representativos de aquella época y su aportación dentro del estilo que la música contemporánea podía ofrecer, prueba de ello es el disco New Gold Dream, de Simple Minds, el cual se presentó de manera oficial el primero de septiembre de 1982, mismo que despúes de tres décadas se ha consagrado como parte elemental de este estilo musical, además de confirmar a Simple Minds como uno de los grupos que ha tratado de explicar de manera plena el estilo musical de una época.

Incluso el semanario británico New Musical Express y Melodía Maker los consideraron como uno de los grupos más influyentes del Reino Unido en ese momento.

La portada de New Gold Dream posee un fondo con un tenue color rosa y una cruz, en cuya intersección se ubica un corazón dentro del cual hay un libro abierto. Con el desprendimiento del electro-rock y del punk, el surgimiento del new romantic, la influencia de David Bowie y Velvet Underground, Jim Kerr (vocales), Charile Burchill (guitarra), Michael MacNeill (teclados), Derek Forbes (bajo) y Mel Gaynor (batería), quien finalmente se integró al grupo al sustituir a Kenny Hyslop, conformaron una impecable labor de equipo para realizar este álbum, el cual está integrado por nueve temas, para lo cual contaron con la participación del productor musical Peter Walsh.

Nueve temas

Someone, Somewhere in Summertime, tema con cierto carácter místico, donde destaca la voz de Kerr, las notas brillantes en el teclado de MacNeil, así como el brillante punteo de Burchill, en la guitarra.

Colours Fly and Catherine Wheel es una canción donde predomina el experimentalismo con el sonido del sintetizador y un estilo ciertamente funky, que no deja de manifestar cierto aire de misticismo elocuente que recuerda parte de su trabajo tres años antes en Reel to real Cacophony, aún con Mike Ogletree en la batería, ya que en ese momento, todavía no se integraba al grupo Mel Gaynor.

El tema Promised You a Miracle se ha conviertido en uno de los clásicos del disco que identifica a la banda plenamente, como parte del sonido que más adelante se hará mas evidente en Sparkle in the Rain y Once Upon a Time.

Big Sleep es una muestra del talento musical de cada integrante de Simple Minds, donde el concepto minimalista de Burchill se hace cada vez más notable, con el acompañamiento de Forbes en el bajo y el teclado insisivo de MacNeil, logrando un tema hipnótico y sumamente relajante.

Somebody Up there Like You es una canción instrumental que deriva de una propuesta diferente de la banda, con un ritmo lento y algunas veces envolvente, aunque para algunos quizás no sea del todo tan interesante, como parte del concepto musical que determina el álbum.

New Gold Dream 81,82,83,84, tema que da nombre al disco, vuelve a ser un ejemplo del papel tan importante de MacNeil en los teclados con el apoyo de Burchill con un ritmo alegre trepidante y bailable.

Glittering Prize demuestra la notable calidad en el bajo de Derek Forbes y, como Promise to a Miracle, se convierte en otro tema imprescindible del grupo con un nivel de emotividad ampliamente disfrutable.

Hunter and the Hunted es una canción con una influencia propiamente jazzística que permite escuchar algunos puntillos de Burchill y la colaboración del notable jazzista Herbie Hanconk en el sintetizador.

King is White and in the Crow es el tema final del álbum épico. De siete minutos de duración es enigmático y obsesivo con una calidad acústica impecable para concluir con un excelente motivo musical.

Más que uno de los más vendidos

Este trabajo logró que por primera ocasión dos canciones de Simple Minds Promised you a Miracle y Glittering Prize estuvieran dentro del Top 20 en el Reino Unido, además de que fue uno de los discos más vendidos en Europa durante aquella época y recientemente, en 2009, el cineasta australiano Gregor Jordan utilizó New Gold Dream 81,82,83,84 como tema principal para su película Los confidentes (The Informers).

A 30 años de historia, New Gold Dream se ha consolidado como uno de los discos más influyentes de los años 80, que ha dejado un lugar trascendental en la historia del rock y debe de ser considerado como ejemplo de calidad en el notable catálogo musical de Simple Minds.