Navolato, Sin., 22 de agosto. El presidente Felipe Calderón aseguró que la lucha de su gobierno en contra de la delincuencia organizada no se debe a una obsesión o algún tipo de fijación con los criminales, sino esencialmente por la seguridad de la población, y que nadie, por sus pistolas, quiera imponer su ley por encima del poder del Estado.

Al poner en operación la troncal del libramiento a Culiacán –obra concesionada a particulares, con una inversión de mil 700 millones de pesos–, Calderón explicó que la lucha emprendida contra la delincuencia no es ni siquiera por un tema de drogas en sí mismo. Es un tema de que no puede haber otro poder por encima del poder del gobierno.

“Y por esa razón, no puede haber alguien que, por la fuerza, por sus pistolas –ahora sí que literalmente–, quiera imponer la ley a nadie. Aquí, la única ley que rige es la de los mexicanos, y los gobiernos estamos obligados a guardar y hacer guardar la ley”, dijo el mandatario.

Calderón realizó una breve gira de trabajo por esta entidad, en la que también encabezó la entrega de la beca educativa 6 millones del Programa Oportunidades en el municipio de Culiacán. Dijo que durante su gobierno, Oportunidades ha entregado unos 280 mil millones de pesos, monto tres y media veces más de lo que entregó la pasada administración y 18 veces más de lo distribuido hace dos gobiernos.

Fue en este acto, realizado en el Centro Cívico Constitución, y ante un auditorio predominantemente de mujeres, que recordó que su gobierno está en el final del camino, a tan sólo tres meses y medio de dejar la Presidencia. Y tal como lo ha venido haciendo en los últimos actos, Calderón citó algunos de los problemas que le tocó enfrentar como titular del Ejecutivo federal durante los últimos seis años, desde la crisis económica global hasta la emergencia sanitaria de la influenza AH1N1.

Sé que hay muchas limitaciones, muchos errores y muchas deficiencias, pero también me siento, insisto, con la tranquilidad de conciencia de que he trabajado al máximo de mis capacidades y de mis limitaciones, dijo Calderón, quien destacó que todavía frente a estas adversidades su gobierno ha podido sumar otras 250 mil familias al Programa Oportunidades.

En ambos actos, el gobernador Mario López Valdez –ex priísta, pero postulado al gobierno estatal por una alianza PRD-PAN– lanzó innumerables loas y reconocimientos a Calderón, por el apoyo dado a Sinaloa en todos los frentes. Así, citó los recursos federalizados, que de 2007 a 2011 pasaron de 20 mil millones de pesos a 31 mil.

Pero también se refirió a la inversión en infraestructura carretera, médica y de educación, así como apoyos al campo, ya sea por heladas o por sequía que ha enfrentado el estado. Y particularmente en el tema de seguridad, donde se han registrado avances importantes.