La Unión Nacional de Avicultores y la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural Pesca y Alimentación (Sagarpa) asentaron que no tienen información precisa del número de aves ponedoras enviadas a los rastros por los productores de los Altos de Jalisco, adicionales a los casi 11 millones sacrificadas por el virus de la influenza aviar.

Sin embargo, fuentes de la Secretaría de Economía estimaron que se sacrificaron 30 millones de aves, dos veces más de las que oficialmente dieron a conocer los avicultores con intención de frenar las importaciones. Dicha situación, expusieron, dificultará el repoblamiento en las granjas.

Enrique Sánchez Cruz, director en jefe del Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica), organismo dependiente de Sagarpa, dijo que se está levantando un censo entre los avicultores de las 438 granjas para tener información precisa del inventario que tenían antes de la presencia del virus AH7N3 y del número de aves que llevaron a los rastros. Los datos estarán listos a finales de este mes, sostuvo. Destacó que con el comienzo del repoblamiento de las granjas –esta semana se entregarán 5 millones de aves– a corto plazo se volverá a recuperar la producción.

Insistió en que el control de movilización de los productos y subproductos avícolas continuará durante algunas semanas hasta septiembre, entonces se volverá a realizar una evaluación para certificar que el virus ya no esté circulando.

Precisó que la Secretaría de Economía solicitó a Senasica que evaluara los protocolos sanitarios de Rusia, Colombia, Malasia, Canadá, Estados Unidos, Colombia, Costa Rica y Chile para importar huevo. A cada uno de los gobiernos de dichos países se solicitó información de la situación sanitaria; Canadá respondió que no tenía disponibilidad del alimento, Rusia no ha respondido; Colombia y Costa Rica aceptaron, pero los volúmenes son pequeños. Además está la petición de tres empresas que procesan huevo, por lo que está abierta la importación del alimento específicamente para la industria.

Explicó que el proceso fue lento, porque el análisis sanitario es una herramienta muy valiosa y no podemos permitir que entren productos que signifiquen riesgo para México. La prevención es lo más valioso. Vietnam ofreció el producto, pero se detectó que en los últimos cinco años tuvo problemas sanitarios, lo mismo pasó en Malasia. Puntualizó que el cupo de importación de 211 mil toneladas aprobadas por la Secretaría de Economía termina en diciembre.

La UNA asentó que las siete asociaciones de Jalisco participarán en el levantamiento del censo, proporcionarán información de la movilización de aves que tuvieron de mayo a la fecha, ya que muchos sacrificaron algunas como un proceso propio de control y otros las llevaron a los rastros. Los datos se entregarán a Senasica para que al cierre de la segunda etapa de vacunación se tengan los datos precisos de lo que pasó.

De los 200 millones de aves ponedoras que hay en el país, Jalisco tenía 90 millones, según datos de la UNA. La producción nacional de huevo el año pasado fue de 2.5 millones de toneladas.