Riesgo de que el narco provoque regreso del autoritarismo, alerta
Martes 21 de agosto de 2012, p. 9
Los integrantes de la caravana que realiza en Estados Unidos el Movimiento por la Paz con Justicia y Dignidad (MPJD) confían en plantear en la Casa Blanca que la paz sólo se alcanzará con diálogo real.
En entrevista telefónica, el poeta Javier Sicilia subrayó que durante su paso por el país vecino han recibido grandes muestras de solidaridad de organizaciones civiles y de comunidades latinas y afroestadunidenses. Sin embargo, agregó, han visto un afán de las autoridades de esa nación por ignorar su responsabilidad en la política de guerra que ha causado tanto daño a México.
Sin bien Sicilia destacó que los políticos demócratas han sido sensibles
a llamados y demandas de la caravana, resaltó que el diálogo también debe construirse con los republicanos.
Si no hacemos la paz entre todos juntos, nunca la habrá. Ésta se puede construir a partir del diálogo, y no de la sordera; hay confrontaciones que nos alejan de ella. Hemos apostado por el diálogo, sabemos que es difícil, problemático, y que las cosas no se dan inmediatamente, pero si se siembra la semilla, podemos alcanzarla.
Al hacer un balance de los primeros nueve días de la caravana, el líder del MPJD afirmó que en esa nación existe gran publicidad en favor de la política antidrogas y criminalización de las poblaciones latinas y afroestadunidenses.
Vamos avanzando, tenemos que romper el cerco de los medios (de ese país), pero hay mucha solidaridad. Vamos por estas comunidades tratando de penetrar en la conciencia, para que la paz se coloque en la agenda política.
La caravana –integrada por un centenar de personas, 40 de ellas víctimas de la violencia generada por la política antidrogas en México– viaja en dos autobuses. Llegó a San Diego, California, el pasado 12 de agosto, un día después de salir de Tijuana, y concluirá el próximo 12 de septiembre en Washington.
Sicilia señaló que hay diferencias importantes en la percepción de la política antidrogas en el vecino país y en México.
“Aquí (en Estados Unidos) están preocupados por sus adictos: el consumo de drogas no disminuye. En contraparte, el asunto de las drogas ha criminalizado a latinos, sobre todo mexicanos, y afroamericanos; las cárceles están llenas de pobladores de estas comunidades (que son detenidos) por portar algunos gramos de mariguana, mientras la mayor parte del consumo lo presenta la población blanca. A eso hay que sumar la venta de armas en el mercado negro.”
En México, el conflicto es de otra manera: “están los cárteles, la corrupción del Estado y los muertos. Ambas naciones han sido afectadas de diferente manera, pero el peligro es que las democracias terminen por destruirse y volvamos a estados autoritarios”.
El poeta pudo atender la llamada de La Jornada tras cerrar actividades en Santa Fe, desde donde se trasladaría a El Paso. Durante la charla, aceptó que las metas de la caravana se van construyendo sobre la marcha.
“Ojalá podamos llegar a la Casa Blanca y poner varios tópicos en el centro de la agenda política: la paz, la cooperación internacional y binacional, la discusión sobre la regularización de las drogas y el control de la venta de armas de asalto.
No venimos a discutir la Segunda Enmienda, la respetamos, pero consideramos que se está violando al poner armas de exterminio en manos de criminales, al permitir que éstas pasen ilegalmente a territorio mexicano para alimentar la criminalidad.