La economía mexicana alcanzó en lo que va de ese sexenio un crecimiento promedio de 2 por ciento anual al segundo trimestre de 2012, muy lejos de la tasa objetivo de 6 por ciento planteada al comienzo del segundo gobierno surgido del Partido Acción Nacional (PAN).

Al dar a conocer el comportamiento económico del país al segundo trimestre de este año, el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) informó que el producto interno bruto (PIB) alcanzó una dimensión de 9 billones 446 mil 170.2 millones de pesos, magnitud 4.1 por ciento mayor a la que tuvo en el mismo periodo del año pasado, sin considerar el valor generado por las actividades informales y subterráneas.

En este nivel, el valor generado por las actividades formales de la economía al segundo trimestre de 2012 es 7.3 por ciento mayor al que tuvo al empezar este sexenio, en el cuarto trimestre de 2006. Bajo respecto a las expectativas de comienzos de gobierno, pero sobre todo para cubrir las necesidades de una población que aumentó 9.2 por ciento en el mismo lapso, al incorporar 9 millones 763 mil personas más.

Con una participación de 3.6 por ciento en la conformación del PIB, el sector agropecuario reportó un incremento de 9.5 por ciento entre el segundo trimestre de 2011 y el mismo lapso del año en curso, impulsado sobre todo por la producción agricola. La agricultura tuvo un crecimiento anual de 16.1 por ciento y, esta elevación, indicó, se debió a la mayor producción de maíz en grano, tomate rojo, chile verde, tomate verde y aguacate, entre otros. Por su parte, la ganadería creció 0.7 por ciento en su producción anual con todo y la sequía que asoló varias regiones.

El sector industrial de la economía tuvo un crecimiento anual de 3.6 por ciento en el segundo cuarto del año en curso. También llamado de las actividades secundarias, contribuyó con 30.2 por ciento del PIB. Sobresalieron por sus componentes las manufacturas, con un incremento de 4.5 por ciento, la construcción con 4.9, y la generación de energía eléctrica, suministro de agua y gas por ductos, con 1.3 por ciento de elevación. La minería petrolera cayó 1.2 y la no petrolera creció 6.1 por ciento.

Los servicios, el sector más grande de la economía formal mexicana, con 65 por ciento del producto interno bruto total, tuvo un incremento anual de 4.4 por ciento en el segundo trimestre y las actividades de mayor crecimiento fueron los servicios financieros y seguros, con una expansión de 12.3 por ciento; el comercio, con 5.6; los servicios de información en medios masivos, 6.6, y los transportes, correos y almacenamiento, con 3.7 por ciento.

El crecimiento promedio del PIB en el primer semestre fue de 4.3 por ciento. La producción del campo y la pesca elevaron 7.6 por ciento el valor de su producción respecto a la primera mitad de 2011; la industria aumentó 4, y los servicios 4.6 por ciento.