El consejero de la Judicatura Federal César Esquinca Muñoa sostuvo este miércoles que es indispensable contar con una procuraduría totalmente autónoma, para que se aleje del señalamiento que siempre ha tenido de ser una parte del Ejecutivo, que responde, muchas veces, a intereses políticos y no con los que tienen que ver, estrictamente, con su función.

Al inaugurar el curso La relación entre lavado de dinero y la extinción de dominio, que se realizó en la embajada de Estados Unidos en México, Esquinca destacó que la reforma constitucional de justicia penal no es solamente un cambio de procedimiento, sino una transformación de toda la cultura jurídica mexicana.

De acuerdo con un comunicado difundido por el CJF, el consejero refirió que como está actualmente la Constitución se permite que las procuradurías tengan cierta dependencia del Poder Ejecutivo, lo cual añadió, debe cambiar.

Esquinca añadió que para lograr con éxito los propósitos de la reforma constitucional penal, es necesario también avanzar en la transformación de todas las instituciones que tienen que ver con el problema de la delincuencia, particularmente a nivel federal.

En el acto, de carácter privado, organizado por el Departamento de Justicia de Estados Unidos, el consejero de la Judicatura señaló que eso significa que se tiene que empezar con la modificación de los sistemas de investigación, pues, sin duda alguna, si no se tiene una policía científica y sistemas modernos de investigación del delito no se va a lograr avanzar.

Para el presidente de la Comisión de Carrera Judicial del CJF, Esquinca Muñoa, también es necesario transformar a los tribunales y juzgados, con una nueva visión y conocimiento universal del problema penal.