Se ofrecen para recuperar subcuenta de vivienda, cobrando de 20 a 30 por ciento del total
Están engañando a los pensionados, dice el instituto; la mayoría recibirán el pago automáticamente
Jueves 16 de agosto de 2012, p. 18
Se publicitan en anuncios de periódicos, se hacen propaganda vía volantes, o directamente se apersonan en el Infonavit para abordar a los pensionados. Son los denominados coyotes, que ofrecen a los trabajadores recuperar los recursos ahorrados en la subcuenta de vivienda mediante el pago del 20 o 30 por ciento del total de la misma.
El costo de la asesoría
lo fija cada uno de ellos, según su criterio, e incluso varía de cliente a cliente. La gerencia del Patrimonio Social del Infonavit sostiene que de ninguna forma es necesario que los pensionados recurran a estos coyotes, y que el sistema que han establecido para el pago de la subcuenta de vivienda está blindado contra ellos, porque los trámites no los pueden realizar terceras personas, ni a éstas se les da información sobre el proceso, ni mucho menos los montos de recuperación de fondos.
Este tipo de personas están engañando a los pensionados, ya que no pueden intervenir directamente en los procesos de recuperación de las cuentas, asegura esta gerencia del instituto y confía en que se irá haciendo a un lado entre los trabajadores el recurrir a estas personas, sobre todo porque 60 por ciento de los pensionados que tienen derecho a la subcuenta recibirá los fondos de manera automática, sin hacer ningún trámite
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En diversos periódicos hay anuncios de estos coyotes. Promocionan la recuperación de la subcuenta, pero también otros servicios dentro del instituto, así como para los trámites de la pensión ante el Seguro Social. Reparten propaganda de sus servicios entre los que tienen cita ante el Infonavit y operan a la vista de todos.
También hay despachos de abogados que se encargan de estos trámites de recuperación de fondos; sin embargo, con ellos el instituto sí firmó un convenio para regular su trato. De cualquier manera, la dependencia asegura que tampoco estos abogados son necesarios, porque se estableció un esquema mediante citas y de manera electrónica para llevar a cabo los procesos, por lo que los pensionados no tienen por qué pagar 20 o 30 por ciento de sus ahorros por estos trámites.
En una visita realizada al área de atención a pensionados, la queja de los ahí presentes es que no se están entregando los recursos con la celeridad que marca la ley –10 días a partir de la firma de solicitud de transferencia electrónica–; señalan que coyotes sí enganchan gente a través de volantes que reparten a las afueras del instituto o abordan directamente a quienes vienen a ver lo de la subcuenta
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Ricardo, un pensionado que pidió se omitiera su apellido, porque ya me dijeron que en los próximos días me harán la transferencia
, platica y muestra: “Aquí traigo varios anuncios de los coyotes; yo no recurrí a ninguno porque me cobraban mucho, pero yo me desistí de mi demanda, firmé la solicitud y aún no me pagan; me dijeron que unos datos estaban mal pero ellos los tomaron: yo les presenté los papeles. Ahora me dicen que en cuestión de días vuelva a checar mi cuenta para saber cuándo pasa el traspaso bancario”.
En la fila de atención a pensionados, los derechohabientes señalan también que hubo problemas con los datos, números de cuentas, de su seguridad social, de beneficiarios y demás, y esto es lo que ha atrasado sus pagos. Eso sí, en las oficinas del instituto hasta servicio médico pusieron para atenderlos.