La Coalición Regional contra el Tráfico de Mujeres y Niñas en América Latina y el Caribe (Catwlac, por sus siglas en inglés) soli- citó a la compañía Iusacell-Une-fon la entrega de información correcta y completa para investigar el secuestro de la adolescen- te María Bárbara Reyes Muñiz, en Cuautitlán Izcalli, estado de México. El colectivo dijo en un comunicado que la joven de 17 años desapareció el 8 de agosto de 2011 cuando acudió a inscribirse a la preparatoria, alrededor de las 8:30 horas. A las 9:05 sostuvo una conversación telefónica con su madre, y después se cruzaron mensajes de texto, en los cuales la menor avisó que dejó su camioneta en su casa, e iría a un centro comercial con una amiga. Ese mismo día, la madre de Bárbara recibió otro mensaje de que su hija había sido secuestrada, y le pedían 500 mil pesos de rescate. Posteriormente recibió mensajes y correos electrónicos con datos intimidatorios, pero nunca se le dijo el paradero de la joven. El colectivo lamentó la ineficiencia del procurador general de de Justicia mexiquense, Alfredo Castillo, quien ya dio por agotadas las líneas de investigación. El próximo 8 de agosto se manifestarán frente a las oficinas de la empresa telefónica, ubicadas en Montes Urales 460, Lomas de Chapultepec, en el Distrito Federal.