Organizaciones civiles e instituciones académicas advirtieron de los riesgos ambientales del proyecto Parque Eólico Cozumel, que está a la espera de la autorización correspondiente de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), y pidieron a la dependencia federal no otorgar el permiso, ya que, dijeron, Cozumel no es un sitio apropiado para un proyecto de las características que se pretenden.

La Manifestación de Impacto Ambiental (MIA) que presentó México Power Group MPG Cozumel SAPI de CV para la autorización de Semarnat establece que el Parque Eólico Cozumel contempla la instalación de 115 aerogeneradores a lo largo de la costa oriental de esa isla.

Al analizar el proyecto, organizaciones ambientalistas, como el Centro Mexicano de Derecho Ambiental, y académicos de la Universidad Nacional Autónoma de México y la Universidad de las Américas-Puebla, detectaron una lista de impactos negativos que el parque ocasionaría al medio ambiente y la sociedad de Cozumel, así como una serie de omisiones sobre la ubicación y efectos nocivos probables.

Algunos de los impactos más graves serían la severa afectación de poblaciones y hábitat de especies endémicas en crítico peligro de extinción, la destrucción de manglar, además de riesgos para la población humana y la infraestructura urbana de Cozumel en caso de que ocurrieran accidentes ocasionados por eventuales huracanes que golpearan la zona, explican en un comunicado.

Las organizaciones detallan que entre los riesgos se encuentran deforestación, pérdida de humedales y de vegetación nativa, remoción de suelos o erosión, alteración de drenajes, contaminación sonora, así como de suelos y aguas, y muerte directa e indirecta de animales, provocando extinciones globales de especies.