El gobierno federal firmó este miércoles un convenio con el Banco Mundial mediante el que se busca encontrar un mecanismo de protección financiera contra desastres naturales para las entidades federativas mexicanas, así como desarrollar un método para conocer la totalidad de los recursos que ha invertido México en los años recientes en materia de prevención de desastres naturales.

Laura Gurza Jaidar, coordinadora general de Protección Civil destacó durante la ceremonia que tuvo lugar en esa dependencia, que en siete años ha habido una importante inversión pública con visión de prevención.

Inversiones de esta naturaleza son el Emisor Oriente, en el Distrito Federal, que reduce de manera importante los escenarios de inundación para quienes vivimos en esta enorme ciudad, explicó.

Aseguró que ante los efectos que provoca el cambio climático la próxima administración federal tendrá que continuar fortaleciendo la política en materia de prevención y atención de desastres e impulsar las acciones en gestión integral del riesgo.

Precisó que el gobierno de Felipe Calderón deja un legado en este rubro con un sistema de protección civil más fortalecido y con instrumentos financieros mejor estructurados e instituciones que no son caprichos y en las que las acciones preventivas no son hijas de la improvisación y del cálculo político.

Al encabezar, junto a Rubem Hofliger, director general del Fondo de Desastres Naturales (Fonden) y Gloria Grandolini, directora del Banco Mundial para México y Colombia, la firma del convenio de asistencia técnica entre México y dicha institución bancaria en materia de gestión integral del riesgo y la presentación de libro Fonden, Gurza afirmó: hemos dejado un motor bien balanceado, alineado, engrasado y engranado para que pueda continuar su camino ante el enorme reto que significa el futuro y el presente con el cambio climático.

Agregó que el gobierno entrante contará con la nueva ley general de protección civil y que están trabajando duro para concluir su reglamento.

Señaló que uno de los retos es superar esa estructura débil en materia de operaciones de emergencia en diversos municipios y estados del país, lo que sin duda vendrá a subsanar el nuevo marco legal, así como el Fondo de coinversión estados-Federación, denominado Foproci.

En su turno, Grandolini resaltó, tras reconocer el liderazgo del país en materia de protección civil, que entre 1970 y 2010 perecieron 3.3 millones de personas en el mundo a causa de desastres naturales y que hubo pérdidas materiales por 2.3 billones de dólares. En el caso de México indicó que 40 por ciento del territorio corresponde a zonas de vulnerabilidad y que una cuarta parte de la población habita en zonas de riesgo.

Mencionó, por último, que las pérdidas anuales son suman 14 mil 400 millones de pesos en México debido a la ocurrencia de desastres.