Lunes 25 de junio de 2012, p. 3
Kiev. Un jugador de la selección holandesa, que prefirió no revelar su identidad, dijo al diario De Telegraaf de su país que tanto él como otros jugadores de la orange se alegraron cuando su compatriota Arjen Robben falló con el Bayern Munich el penal durante la final de la Liga de Campeones que los bávaros perdieron ante el Chelsea inglés en mayo. Hubiera sido aún más arrogante y él ya nunca pasa el balón a los compañeros
, afirmó.