Advierte el Consejo Supremo de las Fuerzas Armadas que combatirá cualquier desmán
Hoy o mañana se darán a conocer los resultados de las elecciones presidenciales
Sábado 23 de junio de 2012, p. 28
El Cairo, 22 de junio. El Consejo Supremo de las Fuerzas Armadas (CSFA), que gobierna Egipto desde febrero del año pasado, afirmó hoy que combatirá firmemente cualquier ataque a instituciones públicas o privadas, advertencia lanzada en medio de una creciente tensión con el partido político religioso Hermandad Musulmana, el cual alentó a continuar con las protestas que tuvieron lugar en la plaza Tahrir y donde se congregaron miles de personas.
Un comunicado del CSFA, instancia que está al frente del país desde el derrocamiento del ex presidente Hosni Mubarak en febrero de 2011, llamó a quienes se manifiestan en las calles a respetar las decisiones legales y amenazó con posibles represalias.
El exhorto fue interpretado como insinuación de que la Comisión Suprema Electoral Presidencial podría declarar al ex militar y ex primer ministro Ahmed Shafik ganador de las presidenciales del pasado fin de semana, que disputó con el islamita Mohamed Mursi, de la Hermandad Musulmana.
La junta militar criticó a los dos candidatos por declararse vencedores de los comicios de manera prematura, porque, expuso, generan confusión y divisiones. Sostuvo que mantendrá en vigor el decreto para reducir la autoridad del próximo mandatario.
Se espera el resultado final de las elecciones para este sábado o domingo.
El CSFA subrayó que el ejército y la policía combatirán cualquier embestida contra dependencias estatales o propiedades privadas para imponer la legalidad inmediatamente
, luego de reportes de que miembros de la Hermandad Musulmana planean crear un caos nacional en caso de que gane Shafik.
Fuentes oficiales comentaron que la junta militar egipcia no descarta recurrir a la fuerza para desalojar la plaza Tahrir y restablecer el orden en esa área del centro de la capital si se prolongan las concentraciones de inconformes varios días.
El CSFA reiteró su respeto por el derecho de manifestarse públicamente y sin poner en peligro los intereses ajenos, pero llamó a todas las partes a evitar cualquier acción que ponga en peligro la seguridad del país
.
El comunicado de los militares se conoció después de que miles de manifestantes volvieron a reunirse en la plaza Tahrir de El Cairo, ante un llamado de la Hermandad Musulmana para rechazar una vez más la decisión de la junta militar de otorgarse mayores poderes.
Durante todo el día los manifestantes, liderados en su mayoría por el movimiento islamista y sus aliados, pidieron que los militares cumplieran sus promesas de entregar el poder a un civil y pusieran fin a la incertidumbre, que se prolonga ya desde las elecciones presidenciales del fin de semana anterior.
La multitud cantó y ondeó banderas egipcias hasta la noche.
Grupos más pequeños de activistas seculares se unieron a la protesta masiva, formada en mayor parte por islamitas.