Wroclaw, Polonia, 8 de junio. Rusia comenzó pisando fuerte en la Eurocopa, al golear en intenso partido 4-1 a la República Checa.

Alan Dzagoev, al minuto 15 de acción, y Roman Shirokov, al 24, adelantaron al cuadro ruso en una notable primera parte del equipo dirigido por el holandés Dick Advocaat.

Vaclav Pilar (52) dio emoción al segundo tiempo, en el que los checos se recuperaron levemente, aunque no pudieron remontar el resultado. Dzagoev marcó su segundo gol (79) y Roman Pavlyuchenko definió el marcador.

De esta forma Rusia encabeza el grupo Grupo A con tres puntos, seguida de Polonia y Grecia. La República Checa se ubica en último lugar, por lo que el partido del próximo martes ante los helenos será fundamental para sus posibilidades de avanzar.

En duelo de virtuosos entre el checo Tomas Rosicky y el ruso Andrei Arshavin se impuso claramente este último, autor de pases de precisión tan quirúrgica como delicada su ejecución.

Los rusos comenzaron adueñándose del partido y tras merodear con insistencia el arco de Petr Cech, el gol no tardó en llegar.

Dzagoev cerró un contrataque fulminante en el que la pelota pegó primero en un poste tras un tiro de Aleksandr Kerzhakov. El rebote fue aprovechado por el juvenil Dzagoev, del CSKA de Moscú, quien con seguridad definió de zurda.

Nueve minutos después Arshavin rompió la defensa checa, con un pase brillante al área que Shirokov convirtió en gol al puntear de cuchara la pelota levemente por encima de Cech.

En menos de media hora los checos estaban golpeados, tambaleantes. Los rusos eran una orquesta, una máquina de generar y ocupar espacios, con jugadores siempre dispuestos a recibir la pelota en posiciones ofensivas.

El hecho de que siete de los 11 titulares jugaran en el Zenit de San Petersburgo se hizo notar ante un rival con 11 jugadores de 11 equipos diferentes.

El gol de Pilar dio esperanzas a los checos a los siete minutos de la segunda parte, también porque Rusia había bajado el pistón, pero sólo fue espejismo, de una sensación temporaria que Dzagoev y Pavlyuchenko diluyeron a puro gol para colgar a su selección el cartel de protagonista del torneo, el mismo en el que hace cuatro años llegó a semifinales.

Al final del partido, el técnico Advocaat aseguró sentirse satisfecho, aunque afirmó que falta mucho por mejorar, sobre todo en la definición.

Estamos contentos. Cuando anotas cuatro goles y ganas ante un rival así, claro que es un buen resultado. Creo que pudimos haber anotado más porque tuvimos muchas oportunidades. Tal vez un equipo mejor nos marcará más tanto, pero para ser el primer juego, estoy feliz, señaló.

Enfrente, Michal Bilek, no ocultó su desilusión: Todos estamos decepcionados. No nos esperábamos esto. Debemos mejorar mucho en la labor defensiva, ya que tuvimos demasiadas pérdidas de balón.