Ciudad Ixtepec, Oax., 19 de mayo. La salida del país del cura Alejandro Solalinde Guerra por las amenazas recibidas ha representado un fuerte golpe anímico para el grupo de personas que laboran en el albergue Hermanos en el Camino de Ciudad Ixtepec, así como para los migrantes que a diario transitan por el lugar, aseguró Alberto Donis, integrante de la coordinación de ese lugar.

No obstante, aseguró que el albergue seguirá en activo para apoyar a los indocumentados que lleguen a Ixtepec; claro que la ausencia del padre nos afecta moralmente, pues él es el que estaba a la cabeza, pero no porque él no esté vamos a dejar de hacer lo que hemos venido haciendo durante tantos años.

Señaló que las amenazas contra el presbítero y algunos otros miembros del albergue promigrante, más allá de causarles miedo les da fortaleza, aunque dijo, sí preocupa la situación, esto (las amenazas) se ha venido presentando desde hace tiempo.

Alberto Donis indicó que el cura recibió más de seis amenazas y que fueron incrementándose, y el acabose fue el domingo 15 de abril cuando el padre salió a recibir a los migrantes que arribaron a Ciudad Ixtepec a bordo de La bestia, unos sujetos descendieron de una camioneta y lo agredieron verbalmente.