Opinión
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Premio Rostros de la discriminación
E

l pasado 10 de abril se emitió la convocatoria para el octavo Premio Nacional Rostros de la Discriminación Gilberto Rincón Gallardo, cuyo objetivo es reconocer la labor de periodistas, caricaturistas y fotógrafos, quienes mediante su trabajo ponen en evidencia, difunden y combaten la discriminación en el país.

El premio es convocado por el Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (Conapred), la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal (CDHDF), la oficina en México del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos (Oacnudh), la Universidad Iberoamericana (Uia), el Instituto Mexicano de la Radio (Imer), la Fundación Manuel Buendía y el Programa Prensa y Democracia (Prende). Este año se suma el Consejo para Prevenir y Eliminar la Discriminación en el Distrito Federal (Copred).

Con dicho galardón se busca otorgar un estímulo a la excelencia periodística que desarrolla temáticas en favor de la no discriminación, la tolerancia, la diversidad, la igualdad de oportunidades y las buenas prácticas. El certamen ha venido ganando prestigio luego de ocho años de su realización, logrando con ello que el periodismo nacional se ocupe cada vez más de visibilizar uno de los fenómenos que impiden el goce pleno de los derechos humanos para todas las personas: la discriminación. La participación en este premio ha venido también creciendo en los últimos años. En 2011 el séptimo premio recibió 22 por ciento más de trabajos en relación con el año anterior.

De los 159 trabajos presentados entonces a la consideración del jurado, 15 correspondieron a la categoría de artículos de opinión, siete a caricatura, 15 a crónica, 13 a fotografía, 29 a reportaje impreso, 15 a reportaje radiofónico, 21 a reportaje televisivo y 44 a trabajos difundidos por Internet. El año pasado se recibieron 98 trabajos de medios de la ciudad de México y 61 producidos por medios de diferentes entidades de la República, entre las que destacan con mayor participación los estados de México, Jalisco, Oaxaca, Guanajuato y Michoacán. Es significativo subrayar la participación de las mujeres en el premio, lo que se puso de manifiesto en 2011, al resultar tres ganadores y cinco ganadoras en los primeros lugares adjudicados a ocho de las categorías.

Una vez más, las instituciones e instancias convocantes hacen este año un llamado a las y los periodistas, los comunicólogos, fotógrafos y caricaturistas para que participen con sus trabajos en este octavo premio nacional, como una forma de comprometerse en el combate a la discriminación, evidenciando los múltiples rostros en que se presenta en el país, los cuales en mayor o menor medida destruyen el tejido social, impiden el ejercicio de los derechos humanos y lastiman la dignidad de las personas.

El premio consiste en 15 mil pesos y un reconocimiento en una ceremonia pública para cada una de las siguientes categorías: reportaje (medios impresos, radio, televisión y/o Internet), artículo de opinión (medios impresos y/o Internet), fotografía (medios impresos y/o Internet), crónica (medios impresos y/o Internet), caricatura (medios impresos y/o Internet), y por primera vez se incluye la categoría de reportaje multimedia en Internet. El jurado está conformado por un grupo plural de 24 reconocidos periodistas de ambos sexos, pertenecientes o que trabajan en varios medios escritos y electrónicos, y especializados en las distintas categorías y géneros de la comunicación. Para la evaluación de los trabajos se tomará en cuenta el análisis y el interés que sus productos despierten sobre el fenómeno de la discriminación, además de los siguientes criterios: objetividad, calidad narrativa, creatividad, enfoque socialmente relevante, equilibrio informativo, investigación original de los hechos, lenguaje incluyente, originalidad, relación del contenido con el derecho a la no discriminación en México, sensibilidad en el desarrollo de los temas, tratamiento de la información en profundidad, valores éticos profesionales reflejados en el trabajo y veracidad de la información.

Los detalles de la convocatoria pueden consultarse en las páginas de las instancias convocantes. Consideramos que es importante que podamos responder a la convocatoria y colaboremos en hacerla llegar a nuestros colegas, con el fin de incentivar su participación, pero sobre todo de contribuir al reconocimiento de una problemática que nos afecta a todos. Es necesario seguir difundiendo el derecho a la no discriminación y visibilizarla como una práctica cultural inaceptable, coadyuvar a su denuncia, a su prevención y a su eliminación.

Recordemos que la discriminación es la negación, exclusión, distinción, menoscabo, impedimento o restricción de alguno o algunos de los derechos humanos de las personas, grupos y comunidades, imputables a personas físicas o morales o entes públicos, con intención o sin ella, dolosa o culpable, por acción u omisión, por distintas razones, entre éstas por origen étnico, nacional, género, edad, discapacidad, condición jurídica, social o económica, apariencia física, religión u opiniones políticas. Y que entre la labor de defender y promover los derechos humanos y el ejercicio responsable de la libertad de opinión siempre se han dado sinergias favorables para la puesta en práctica del derecho a la información de la sociedad y de su derecho a participar activamente en la solución de los problemas que le afectan. No por acaso son sus actores quienes hoy padecen mayores agravios por las fuerzas intolerantes, autoritarias y antidemocráticas. Tampoco por casualidad se exige al unísono que sean protegidos.