Zapopan, Jal., 18 de mayo. El gobierno federal anunció la creación de un fondo extraordinario de 35 millones de pesos para impulsar un plan urgente de restauración y conservación del bosque de La Primavera, afectado por un incendio ocurrido entre el 21 y el 25 de abril pasado. El siniestro consumió 8 mil 177 hectáreas de las más de 30 mil que tiene la zona natural protegida.

Luego de una mesa de evaluación en la que participaron autoridades federales y estatales, el presidente Felipe Calderón dijo que instruyó a la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas a revisar los alcances del convenio que desde 1995 dio al gobierno de Jalisco el manejo del bosque, hasta entonces administrado por la Federación, para salvaguardarlo natural ante la presión de la mancha urbana.

El titular del Ejecutivo federal anunció que se realiza un diagnóstico final sobre el impacto del incendio en los ecosistemas, suelo, fauna y flora, además de las emisiones de bióxido de carbono que se generaron, parte importante de las cuales afectaron durante al menos dos días a la población de Guadalajara.

Rafael Elvira Quesada, secretario de Medio Ambiente y Recursos Naturales, afirmó que está garantizado el cumplimiento de la Ley General de Desarrollo Forestal que impide el cambio de uso de suelo en un terreno incendiado hasta que hayan pasado al menos 20 años.

Más de cuatro mil siniestros

La zona natural protegida de La Primavera está ubicada en los municipios de Zapopan, Tlajomulco, Tala y el Arenal. El 46 por ciento de la superficie dañada era de matorrales y arbustos, 39 por ciento de hojarasca, 9 por ciento de árboles de renuevo y 6 por ciento –491 hectáreas– de arbolado adulto.

En la reunión, a la que acudió el gobernador Emilio González Márquez, Felipe Calderón apremió a comenzar la restauración y limpieza de las zonas más afectadas –con la participación ciudadana–, para aprovechar la próxima temporada de lluvias y evitar la erosión del suelo.

El de La Primavera, dijo, fue el segundo más grave de los 4 mil 191 incendios forestales ocurridos esta temporada de estiaje, los cuales han dañado casi 118 mil hectáreas.

Uno de gran extensión territorial fue el de la sierra de Durango, en Canatlán, con 11 mil 200 hectáreas.

Otro, en Chihuahua

Un incendio forestal en el municipio de Ocampo, ubicado en lo alto de la sierra Tarahumara, lleva siete días sin ser controlado y ha consumido al menos mil 500 hectáreas.

Los gobiernos federal y estatal llevaron al lugar un helicóptero y una cisterna para abastecer de agua a los más de 100 brigadistas que tratan de controlarlo; se considera que es el más grande en este momento.

El alcalde Manuel Hernández Martínez dijo que el fuego ha destruido mil 500 hectáreas en los ejidos de Ocampo y Cerro Pelón, además de un predio particular, y avanza hacia una barranca del estado de Sonora.

El fuego se ubica entre el poblado de Cahuisori y la cabecera municipal, donde se encuentran las torres de la Comisión Federal de Electricidad con cables de alta tensión, así como la mina José María, de AuRico Gold; está también a un kilómetro de la zona urbana del poblado de Huajumar.

Raúl Olivas Gallegos, jefe de incendios del gobierno del estado en la zona serrana, informó que otro siniestro más grande ocurre en la zona de Huizopa, en el municipio de Madera; parte llegó a Sonora, dijo, y se analiza la forma en que será combatido, ya que el terreno es muy agreste.