Serie de declaraciones y desmentidos en torno al país helénico
Sábado 19 de mayo de 2012, p. 29
Bruselas, 18 de mayo. La incertidumbre por la posibilidad de que Grecia abandone el euro abrió una serie de declaraciones y desmentidos. El primer caso se dio cuando el comisario europeo de Comercio, Karel De Gucht, dijo que la Comisión Europea y el Banco Central Europeo estudian diferentes escenarios
ante un fracaso de la nación helénica, declaración desmentida por el comisario europeo de Asuntos Económicos, Olli Rehn.
A su vez, el gobierno alemán negó que la canciller Angela Merkel haya propuesto a Grecia convocar un referendo sobre la permanencia de ese país en la eurozona, tal como había anunciado previamente la oficina del primer ministro griego en Atenas y que generó enojo entre los diversos partidos políticos.
Estos informes no son correctos
, dijo una portavoz gubernamental en Berlín a la agencia Dpa, sin más detalles.
A su vez, el presidente del Parlamento Europeo, el socialdemócrata alemán Martin Schulz, afirmó sobre una eventual salida de Grecia de la eurozona que mucha gente lo ve como el final de una evolución negativa, (pero) para mí (sería) el inicio de una evolución todavía más negativa
.
Schulz hizo las declaraciones a la radio pública alemana Deutshlandfunk, en directo desde Atenas, donde tenía previsto reunirse, entre otros, con el presidente Carolos Papulias.
También tenía programado un encuentro con Alexis Tsipras, jefe del partido griego de la izquierda radical Syriza, favorito para las elecciones legislativas del mes que viene, el cual se opone a la política de austeridad.
No he dicho que esta opción no exista, pero la considero muy arriesgada
, apuntó.
En caso de ocurrir, la economía griega se derrumbaría en unos días
, y los europeos deberían ayudar al país con “miles de millones de euros.
Mi impresión es que todavía no hemos probado todo lo posible para estabilizar el paisaje político y volver a poner a la economía griega en la buena dirección
, añadió.
A su vez, el ministro alemán de Finanzas, Wolfgang Schauble, calculó que la crisis de confianza de los mercados hacia la zona euro debería remitir de aquí a uno o dos años y reafirmó que Berlín desea la permanencia de Grecia en Europa.
En un periodo de entre 12 a 24 meses los mercados financieros se tranquilizarán
, consideró el ministro en la radio francesa Europe Uno.
Schauble reaccionaba así a las declaraciones de su ex homólogo francés Francois Baroin, quien había previsto que la crisis podría alargarse otros cuatro o cinco años.
Queremos que Grecia se quede en Europa, pero esto presupone que Grecia, por su parte, haga lo necesario para tener un desarrollo económico más sano
, afirmó, en referencia al severo programa de austeridad con el que se ha comprometido Atenas a cambio de la ayuda financiera de la Unión Europea y el Fondo Monetario Internacional.
El deslucido crecimiento de las economías emergentes de Europa podría transformarse en recesión en los próximos 12 meses si aumenta la crisis de la zona euro, apuntó este viernes el Banco Europeo para la Reconstrucción y el Desarrollo.
Preparan impresión de dracmas
La imprenta británica De La Rue ya prepara un plan de contingencia para imprimir dracmas en caso de que Grecia deje la zona euro y haga un pedido de billetes, declaró a Reuters una fuente de la industria, que pidió no ser identificada.
Una salida del euro generaría una fuerte demanda por dracmas, y si bien las imprentas estatales de Grecia podrían organizar su producción, un puñado de firmas globales como De La Rue –la mayor fabricante mundial de billetes, con impresiones de más de 150 monedas nacionales– podrían ser convocadas, apuntó la fuente.