La Habana, 18 de mayo. La empresa española Repsol informó hoy que el pozo de petróleo que perforaba en aguas profundas de Cuba en el Golfo de México resultó negativo, pero evitó precisar si hará un nuevo intento para buscar crudo en la zona o abandonará sus proyectos en la isla.

El pozo que estábamos perforando ha resultado negativo y ahora estamos evaluando la situación, dijo a La Jornada un portavoz de la empresa.

Esta es la segunda perforación de Repsol en las aguas profundas cubanas que termina sin resultados, después de la que realizó en 2004 y culminó con el hallazgo de depósitos que la empresa consideró incosteables para su explotación comercial.

Consultado por este diario, el investigador de la Universidad de Texas Jorge Piñón opinó que las noticias son desalentadoras pero no nos sorprenden. En este negocio difícil y de alto riesgo nunca se está seguro hasta el final. La pregunta es si Repsol está dispuesta a perforar un segundo pozo o se retira definitivamente de Cuba.

De acuerdo con el plan inicial, Repsol trabajaría junto con sus aliados (la noruega Statoil y la india ONGC Videsh) en dos pozos exploratorios. Luego la malaya Petronas (en sociedad con la rusa Gazprom) perforaría uno más y, de acuerdo con los resultados, aún se buscaría crudo en otras dos estructuras.

Ex directivo de la petrolera Amoco, Piñón consideró que ahora hay que esperar los resultados de Petronas. Para Cuba, no encontrar petróleo este año significa que continuará dependiendo de terceros para sus necesidades petroleras, lo cual a largo plazo no es positivo. Cuba necesita su independencia energética para poder trazar su futuro camino político y económico.

Aunque no hay reportes actualizados, se sabe que Cuba presiona a la baja su consumo energético, que ronda los 140 mil barriles diarios de petróleo y derivados, de los cuales produce cerca de 55 mil en tierra y aguas someras. El resto lo importa de Venezuela, que además surte excedentes para la refinación en una planta binacional en la isla.