Lunes 30 de abril de 2012, p. 36
La cúpula del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) echará mano de diversas estrategias de comunicación, entre ellas redes sociales, entrevistas en medios, volanteos e incluso movilizaciones para ratificar su postura de postergar la evaluación universal programada por la secretaría del ramo para el próximo 24 de junio.
Este lunes, a las 22 horas, vence el registro para participar en dicho examen, el cual a su vez ha sido rechazado por la disidencia magisterial. La Jornada dio a conocer la semana pasada que de 550 mil maestros de primaria en el país sólo 165 mil se han inscrito en el proceso, lo que representa apenas 30 por ciento del total a evaluar.
Por otro lado, este día a las 11 horas también se reunirá el Comité Ejecutivo Nacional del SNTE para evaluar la ruta seguida en el grupo de trabajo conformado por representantes de la Secretaría de Educación Pública (SEP) y el sindicato, con la finalidad de retomar las diferencias en torno a la evaluación y así, superar
lo que el sindicato ha llamado incumplimientos
de la autoridad educativa.
Tambores de guerra
De acuerdo con fuentes de la organización sindical, continúan latentes los tambores de guerra
entre las partes, y para ese gremio las tareas del grupo de trabajo están desfasadas
.
Señalan que en el grupo de trabajo no se dará el arreglo, sino más bien en las comunicaciones y en los acercamientos a otro nivel
. Esto es, entre la lideresa magisterial, Elba Esther Gordillo, y los representantes del Poder Ejecutivo.
En tanto, la cúpula sindical se alista para enviar a sus afiliados a la movilización del primero de mayo. A contracorriente de sus propias estrategias de lucha, ya que para el SNTE las manifestaciones no son la vía para solucionar los problemas y, además, forman parte del quehacer de la disidencia magisterial, ahora los institucionales hará un mitin frente a la sede de la SEP.
En otras entidades, como Tamaulipas, la dirigencia seccional informó que no saldrían a la calle este primero de mayo porque no se expondrá a los docentes ante la inseguridad que prevalecen en la zona. Sin embargo, harán movilizaciones, volanteos y reuniones de comités delegaciones en diversas entidades del país para exigir a la SEP que cumpla con los compromisos de la evaluación universal y pedir un incremento salarial de al menos 4.7 por ciento.