Con el estreno del montaje Enrique IV, obra escrita por William Shakespeare, el próximo 12 de abril en el Zócalo de la ciudad de México, por primera vez se estrenará en nuestro país esa obra del dramaturgo inglés.

De igual manera, será la primera ocasión que en la Plaza de la Constitución, donde se realizan diversas manifestaciones artísticas, políticas y sociales, se lleve a cabo un montaje a cielo abierto, comentó Luis de Tavira, director artístico de la Compañía Nacional de Teatro (CNT).

Como se adelantó en estas páginas (La Jornada, 10/12/11), la CNT fue invitada a participar en el World Shakespeare Festival, en Londres. el cual forma parte de las Olimpiadas Culturales que se iniciarán el 23 de abril, las cuales se desarrollarán de manera paralela a los Juegos Olímpicos en Reino Unido, que son organizadas por la Royal Shakespeare Company y el Globe Theatre.

37 compañías, 37 obras

El multicultural encuentro teatral tiene la finalidad de celebrar el aniversario del natalicio de Shakespeare (1564-1616), al cual asistirán 37 agrupaciones de Europa, África, Asia y América Latina. El número de compañías invitadas responde a la cantidad de obras escritas por el autor de Hamlet.

Gracias a The Anglo Mexican Foundation, la CNT fue invitada para representar Enrique IV (primera parte), así como la obra original Un soldado en cada hijo, del dramaturgo y director mexicano Luis Mario Moncada, única pieza extranjera contemporánea que se presentará en el festival.

El estreno de Enrique IV, con la CNT en el Reino Unido, debe cumplir las condiciones escénicas e históricas del teatro The Globe (el cual es una replica del original que fue destruido por un incendio en 1613), por lo que se construye un escenario trashumante, al cual se ha nombrado La corrala del mitote, y será instalado en el Zócalo, donde del 12 al 29 de abril se escenificará Enrique IV.

El escenario, detalló De Tavira, implica un semicírculo de graderías, con un patio central y un tablado frontal con columnas y balcón, como un espacio isabelino. Iván Cervantes ideó el esqueleto tubular, con madera en las graderías y será recubierta alrededor con un material ligero para poder aforar.

Con capacidad aproximada para 450 espectadores, el público se ubicará entre la arena o patio (a nivel de piso) y los dos niveles de la galería, lo que permitirá una perspectiva teatral a tres frentes, a cielo abierto, sin armaduras escenográficas ni la amplificación eléctrica de los sonidos.

El reto es muy grande, explicaron De Tavira y y el director de escena Hugo Arrevillaga. Estar en el Zócalo implica el ruido que hay alrededor, la afluencia de transeúntes, tráfico vehicular y vendedores ambulantes, entre otras cuestiones.

Con dirección de Hugo Arrevillaga, traducción de Alfredo Michel y dramaturgia de José Ramón Enríquez, las funciones serán jueves y viernes a las 18:30 horas, sábados y domingos 13 y 18:30 horas. Los boletos son gratuitos y la entrega será de manera individual el día de la función, de 10 a 14 horas y de 16 a 18:30 horas, en el Zócalo, esquina con Pino Suárez.