Tokio, 28 de marzo. Empezaron las Grandes Ligas con el primer duelo de la temporada. En un juego emocionante, una remolcada del segunda base Dustin Ackley consiguió la carrera de diferencia.

Al filo del precipicio, un out en la parte alta de la undécima entrada permitió a Brendan Ryan romper el empate a uno y enfilar a Marineros de Seattle a ganar el partido inaugural 3-1 sobre Atléticos de Oakland.

Con este duelo, efectuado ante más de 44 mil aficionados que abarrotaron el Tokio Dome, arrancó la temporada 2012 del beisbol de Grandes Ligas, cuya campaña oficialmente comienza el próximo miércoles.

Con ese ataque, Brendan Ryan abrió el turno con un doblete por el jardín izquierdo; Chone Figgins avanzó al corredor con toque de sacrificio por la tercera base y Ackley rompió la igualada a una carrera (2-1) con su sencillo al central.

Ackley se robó la intermedia y el jardinero izquierdo de Marineros, el japonés Ichiro Suzuki, remolcó la anotación que dio tranquilidad a Seattle, tras sacar sencillo al jardín central y dejar las cifras definitivas 3-1.

La estrella fue el asiático, ya que conectó cuatro imparables en sus cinco apariciones en la caja de bateo, con una carrera producida.

El héroe ofensivo de los Marineros fue su segunda base Ackley, quien bateó par de imparables, entre ellos un cuadrangular solitario en la segunda entrada, en cinco turnos oficiales con dos carreras anotadas y dos producidas.

El triunfo fue para el relevista Tom Wihelmsen (1-0) con la ayuda del cerrador Brandon League, quien se apuntó su primer salvamento de la temporada. La derrota la cargó el relevista Andrew Carignan (0-1).

Por otra parte, el equipo Dodgers de Los Ángeles fue vendido a un grupo de inversionistas encabezado por el ex basquetbolista Earvin Magic Johnson, quien ganó la subasta para comprar la franquicia por un precio récord de 2 mil millones de dólares.

El costo del equipo, hasta ahora en manos de Frank McCourt, es el mayor de la historia jamás desembolsado en Estados Unidos por una franquicia deportiva, aunque no incluye el Dodger Stadium, que fue vendido por separado en 150 millones de dólares.