A escala mundial deja ganancias por 32 mil millones de dólares
El problema se acentúa en los principales destinos turísticos
Lunes 26 de marzo de 2012, p. 12
La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) subrayó ayer la necesidad de combatir la trata de personas en diferentes zonas turísticas del país, actividad ilícita que genera ganancias superiores a 32 mil millones de dólares en todo el mundo.
El fenómeno, aseveró la CNDH, se reporta principalmente en ciudades como Acapulco, Cancún, Puerto Vallarta y Distrito Federal, en las cuales niños y adolescentes son engañados con falsas promesas de empleo y son forzados a prostituirse o realizar trabajos domésticos, agrícolas y en la industria de la construcción en condiciones deplorables
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Subrayó que, en coordinación con organizaciones de la sociedad civil, ha detectado a víctimas de ese flagelo en las urbes turísticas mencionadas, donde hay alta afluencia de visitantes nacionales y extranjeros
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La CNDH destacó que, mediante el Programa Contra la Trata de Personas, ha puesto en marcha campañas de capacitación, en las que han participado más de 20 mil personas, entre ellas servidores públicos y trabajadores de los sectores hotelero, restaurantero y de transporte, con la finalidad de prevenir ese delito y favorecer la detección de víctimas para evitar la explotación sexual de niños y adolescentes.
Apenas la semana pasada la directora general del Sistema Nacional para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF), Cecilia Landerreche, expresó en el Senado que en 256 ciudades del país se acentúa el problema de la trata, sobre todo de niños y jóvenes.
De igual forma, la titular de la Comisión Nacional para prevenir la Violencia contra las Mujeres, Dilcya García Espinoza de los Monteros, al participar la semana pasada en el Foro contra la violencia hacia niñas, niños, adolescentes y mujeres, efectuado también en el Senado, relató un caso: Una adolescente rogaba a su mamá que la inscribiera en la secundaria. Le decía que quería estudiar. Pero ella le respondió que no, porque estaba segura de que no iba a terminarla. Que se iba a ir con el novio o iba a quedar embarazada
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En cambio, le dijo a la adolescente que quería pagar los estudios a sus hermanos, pero que ellos no deseaban ir a la escuela. La joven logró inscribirse y empezó a trabajar para comprar libros y útiles. Cuando la madre vio que su hija llevaba buenas calificaciones decidió ayudarla con los textos
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La funcionaria enfatizó: Es increíble que todavía se vean esas situaciones
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