Sociedad y Justicia
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No debería perder varios meses en adaptarse ni que su principal virtud sea plegarse al Ejecutivo

Piden expertos para la SEP un humanista que conozca en profundidad el sistema educativo

La designación requiere de Felipe Calderón una actitud prudente realista y juiciosa, consideran

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Alumnos de la Universidad Nacional Autónoma de México en la Biblioteca Central, de Ciudad Universitaria, en imagen de archivoFoto María Meléndrez Parada
 
Periódico La Jornada
Domingo 15 de enero de 2012, p. 37

Ante la crisis educativa que enfrenta el país, no podemos darnos el lujo de tener un nuevo secretario de Educación Pública que se tome seis u ocho meses para conocer el sistema educativo y que su principal preocupación sea responder a los intereses del Presidente de la República, advirtieron especialistas.

Sería un riesgo muy serio, afirmaron, que se opte nuevamente por un funcionario incondicional al presidente Felipe Calderón, pero que relegue las funciones prioritarias de la Secretaría de Educación Pública (SEP), pues cabe preguntarnos dónde está un Jaime Torres Bodet para la SEP, pues hasta el momento no se ha mencionado un candidato ideal ni razonablemente adecuado.

Ángel Díaz Barriga y Olac Fuentes, expertos en el sistema educativo, indicaron que ante la intensa búsqueda que realiza el presidente Felipe Calderón para encontrar un remplazante en esa dependencia ante el agravamiento en el estado de salud del anterior secretario, Alonso Lujambio: Lo ideal es que se designe a un humanista que comprenda los problemas del sistema educativo en sus dimensiones profundas y no se quede en medidas efectistas.

Sin embargo, reconocieron que a menos de 11 meses para que concluya la administración federal, hay muy pocas posibilidades de que se aplique un cambio de fondo en las políticas educativas. Es demasiado tarde para generar un impacto en la conducción educativa.

En entrevista por separado, Díaz Barriga, investigador emérito y catedrático del Instituto de Investigaciones sobre la Universidad y la Educación (IISUE) de la Universidad Nacional Autónoma de México, afirmó que si consideramos los antecedentes de quienes han ocupado la SEP en la presente administración, como Josefina Vázquez Mota y Alonso Lujambio, quienes tardaron seis u ocho meses en aprender lo básico del sistema educativo, tampoco podemos esperar gran cosa de esta designación.

Afirmó que es lamentable que el titular de la SEP conociera la escuela pública siendo ya secretario, pues no saben qué ocurre en las escuelas de los barrios, de las poblaciones e incluso de las ciudades, por eso autorizan proyectos y reformas descabellados.

Como ejemplo citó la aplicación de un modelo de evaluación universal de docentes y directivos elaborado sobre las rodillas, mientras que a los expertos en educación y evaluación se nos ha dado siempre una patada, no sólo en esta, si no en varias administraciones.

Olac Fuentes Molinar, experto en el sistema educativo nacional y ex subsecretario de Educación Básica y Normal, indicó que con una visión realista, le queda poco menos un año a esta administración y un cambio de fondo sería difícil. Por esta razón, lo ideal es que quien sea designado al frente de la SEP conozca el sistema educativo y tenga la visión para corregir y evitar las peores consecuencias de los errores e improvisaciones que caracterizaron los años anteriores.

No obstante, admitió, la administración calderonista no se ha destacado por la formación de cuadros, por lo que puede subsistir la tentación de buscar funcionarios que no tengan ninguna idea de lo que es el sistema educativo nacional.

Consideró que la elección del nuevo titular de la SEP reclama del presidente Calderón una actitud prudente, realista y bien analizada para evitar improvisaciones. El sector demanda una conducción firme ante un escenario muy complejo que se deberá asumir, además, en los últimos momentos de una administración que está por concluir.

Alonso Lujambio fue trasladado el pasado jueves a Little Rock, Arkansas, para continuar el tratamiento contra el cáncer que lo aqueja.