El gobierno de México solicitó ayer al de Estados Unidos –mediante una nota diplomática– que otorgue al ex presidente Ernesto Zedillo la misma inmunidad de la que gozan los mandatarios en funciones, y por tanto deseche la queja que se presentó en una corte de Connecticut contra él por su presunta responsabilidad en la matanza de Acteal.

Aunque la petición habría sido hecha desde noviembre del año pasado por medio de la embajada de México en Washington, de acuerdo con la agencia Notimex, la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) se negó a confirmar o desmentir la información o a hacer comentario alguno sobre el tema.

Los abogados del ex mandatario llamaron a la corte que recibió la demanda civil a desecharla de inmediato, ya que no hacerlo implicaría violar la soberanía de México e impugnar la carrera de un personaje ampliamente reconocido por ser el arquitecto de reformas que llevaron al país a la libertad electoral, el respeto a los derechos humanos y una floreciente economía.

Mediante un documento de 18 páginas, los defensores resaltaron que Zedillo no sólo llevó a su país a superar una grave crisis económica, heredada de la administración anterior, sino logró reformas democráticas históricas en los sistemas electoral y judicial de México, además de implementar programas radicales de asistencia social para los ciudadanos y las regiones más pobres.

Por ello señalaron que la demanda por 50 millones de dólares en daños se basa en acusaciones infundadas e injuriosas. Reconocen que la matanza de Acteal fue una tragedia, pero aseguran que no fue planeada por el ex mandatario, sino fue resultado de disputas añejas relacionadas con la posesión de la tierra, que por décadas dividieron a las comunidades indígenas locales.

Frente a dicho escenario, los abogados subrayaron que Zedillo logró progresos significativos en la estabilización de Chiapas (...) cooperó completa y prontamente en las investigaciones de la tragedia de Acteal y ofreció ayuda a los familiares de las víctimas.

La defensa del ex presidente insistió en que no sólo los argumentos de la queja son falsos, sino que hay razones para dudar que los demandantes anónimos son quienes dicen ser, ya que incluso la organización civil Las Abejas los desconoció.

Cualesquiera que sean sus motivaciones, la demanda debe ser prontamente desechada. Como ex jefe de Estado de México, una democracia soberana y aliada incondicional de Estados Unidos, Zedillo tiene inmunidad frente a cualquier queja presentada contra él por acciones que tomó en sus atribuciones como presidente, alegaron.

De acuerdo con los abogados del hoy profesor de la Universidad Yale, mientras más tiempo tarde la corte en desechar la queja, mayor será la incertidumbre legal que se genere en el mundo con respecto a la seguridad de la que pueden gozar sus ex presidentes en territorio estadunidense y, de la misma forma, los ex funcionarios de Washington pueden sentirse vulnerables en cualquier otra nación.

Exculpación fast track

Para reforzar este argumento mencionaron diversos casos donde la justicia de Estados Unidos optó por desechar quejas que involucraban a ex funcionarios extranjeros, entre ellas la interpuesta contra un antiguo agente de seguridad israelí por autorizar el bombardeo de un edificio de departamentos en Gaza, o la del ex presidente colombiano Álvaro Uribe, señalado por encubrir a grupos paramilitares que asesinaron a más de 70 personas por órdenes de una empresa trasnacional.

Por lo anterior llamaron a la corte a desechar la queja de inmediato, ya que las leyes se lo permiten si el Departamento de Estado no se manifiesta al respecto en un tiempo razonable. Si esta entidad, además, apoya la petición de México, la demanda quedaría desechada por fast track.