Damasco, 5 de enero. Las autoridades sirias liberaron a 552 detenidos implicados en la rebelión contra el régimen del presidente Bashar Assad, informó este jueves la agencia oficial Sana, al señalar que esas personas no tienen las manos ensangrentadas.

Se trata del segundo grupo de detenidos liberados desde el 26 de diciembre, cuando inició sus trabajos la misión de observadores de la Liga Árabe para vigilar la situación en Siria, y suman desde entonces mil 307 los excarcelados implicados en los últimos acontecimientos.

La misión de observadores forma parte de un plan para salir de la crisis elaborado por la Liga Árabe, que prevé el cese de la violencia, la retirada del ejército de las ciudades y la liberación de los manifestantes detenidos.

Previamente a la llegada de la misión de observadores internacionales, en noviembre y en diciembre, las autoridades sirias habían liberado a 5 mil 75 detenidos en actos de represión.

En Nueva York, la representación siria ante la ONU informó que a la fecha 3 mil 259 personas han sido asesinadas, entre civiles, soldados y policías, a manos de grupos armados opositores que buscan derrocar al régimen de Assad.

El informe señala que entre las bajas de uniformados destacan 913 militares y 215 policías, así como 666 secuestros de personas, de las cuales 96 fueron asesinadas, 22 liberadas tras el pago de un rescate y el resto puestas en libertad sin nada a cambio.

La información incluye el plagio de 70 militares y 164 policías, 86 asesinados por sus captores, así como el robo de más de 300 vehículos de ambos cuerpos y de casi 600 pertenecientes a civiles.

En tanto, zapadores militares desactivaron más de 50 bombas colocadas por los grupos armados antigubernamentales en distintas áreas de la norteña provincia siria de Idleb, colindante con Turquía. El gobierno sirio ha denunciado la reiterada infiltración de grupos armados desde suelo turco, y que según medios de prensa en la zona se trata de mercenarios entrenados allí.

El líder del Ejército Sirio Libre, integrado por desertores del ejército regular, coronel Riad Assad, insistió en que la Liga Árabe retire a sus observadores y que intervenga la ONU en esa tarea.

Se reportó la primera deserción del gobierno sirio al marcharse a Egipto un jefe de finanzas del primer ministro y del Ministerio de Defensa, Mahmud Hay Hamad.