Pérdida de memoria y somnolencia, entre los daños
Acusan que la liga hizo declaraciones falsas sobre gravedad de sus lesiones
Sábado 24 de diciembre de 2011, p. a18
Miami, 23 de diciembre. Veintiún ex jugadores de la NFL demandaron a la liga por los efectos de las conmociones cerebrales que aseguran sufrieron mientras estaban en activo.
La demanda, similar a otra radicada esta semana en Atlanta, es la más reciente de varias que han interpuesto ex militantes del futbol americano estadunidense en los meses recientes.
La denuncia fue recibida este jueves en Miami en nombre de los ex jugadores de Delfines, Patrick Surtain, Oronde Gadsen y otros 19. La mayoría vive en Florida.
Acusan a la NFL de omitir u ocultar evidencia que vincula las conmociones cerebrales con problemas neurológicos a largo plazo. La liga negó las acusaciones y afirmó que la salud de los implicados es una de sus prioridades.
Cualquier alegato en el sentido de que la NFL trata de distraer la atención de los jugadores intencionalmente no tiene sentido. Eso va contra las acciones de la liga para proteger de la mejor manera posible a sus futbolistas y utilizar los tratamientos médicos más avanzados para las contusiones
, declaró el organismo.
Los quejosos afirman que la NFL hizo declaraciones falsas sobre la gravedad de sus lesiones con la intención de inducir a los jugadores, incluidos los demandantes, para volver a jugar tan pronto como fuera posible físicamente después de haber sufrido una conmoción cerebral.
Según la demanda, después de numerosos estudios sobre los riesgos de esos padecimientos, la NFL creó un comité de investigadores y doctores en 1994 para estudiar esas lesiones.
En Atlanta, Jamal Lewis y Dorsey Levens encabezan al grupo de cuatro ex NFL que se presentaron en una Corte Federal para señalar que lesiones cerebrales los han mantenido luchando con problemas médicos, incluso varios años después de terminar sus días como profesionales.
Aseguraron que la liga sabe desde los primeros años de la década de los 20 del peligro que representan las contusiones cerebrales y hablaron de distintos problemas médicos, que incluyen pérdida de memoria, dolores de cabeza, somnolencia y otros daños no especificados.
La NFL ha hecho todo lo posible por esconder este asunto y distraer la atención de los jugadores de los riesgos asociados con las contusiones
, argumentaron los quejosos durante el juicio que iniciaron esta semana en Atlanta.
En los primeros días de este mes, hasta 12 ex jugadores, incluido el receptor Joe Horn, abrieron un juicio contra la NFL afirmando que se había extendido el uso de una droga contra la inflamación que aumenta los riesgos para quienes sufren lesiones en la cabeza.