Miami, 23 de diciembre. Con el inicio de la NBA este domingo –que contará con la participación de los mexicanos Eduardo Nájera y el debutante Gustavo Ayón–, la alegría regresa para los amantes del baloncesto en todo el mundo, después de largos meses de incertidumbre por el cierre patronal, que provocó una reducción de la temporada a 66 partidos y tuvo un gran perdedor: el comisionado David Stern.

Serán cinco encuentros los que se disputarán el día de Navidad, el más esperado entre los campeones Mavericks, del astro alemán Dirk Nowitzki, y Miami Heat, de LeBron James, Dwyane Wade y Chris Bosh, en el American Airlines Center, de Dallas.

El choque Mavericks-Heat coloca en la apertura del torneo a los dos finalistas de la contienda anterior, hecho que no ocurría desde 1998-1999 cuando también se redujo la competencia por falta de un acuerdo laboral.

Los otros duelos de la jornada inicial serán Lakers-Chicago, Celtics-Knicks, Orlando Magic-Oklahoma City Thunder y Clippers-Golden State.

Para llegar a un feliz desenlace tuvo que atravesarse un largo camino de discusiones e intransigencia que se extendió durante 149 días y mantuvo en duda el futuro del torneo.

Las concesiones

Los jugadores se vieron obligados a hacer concesiones significativas, incluida una reducción de hasta 300 millones de dólares en salarios por la temporada, lo que significa unos 3 mil millones durante los próximos 10 años que estará vigente el pacto.

Los propietarios de los equipos habían ofrecido compartir las ganancias a la mitad, con varias limitaciones en el tope salarial, mientras los jugadores, que recibían 57 por ciento, no estaban dispuestos a aceptar menos del 52.

Aunque intentó mostrarse como un mediador equilibrado, que sólo respondía a los intereses del basquetbol, Stern manejó el lockout con clara inclinación hacia los dueños, lo que provocó quejas de los jugadores.

Aprobado el nuevo convenio, Stern volvió a ser centro de críticas al convertirse en un freno para el traspaso del español Pau Gasol y Lamar Odom, de Lakers, en un intercambio con el base Chris Paul, que finalmente recaló en Clippers.

Stern señaló que impedía el cambio por los mejores intereses del baloncesto, pero el base de Lakers y presidente del gremio de basquetbolistas, Derek Fischer, dijo estar en desacuerdo con lo que hizo el comisionado, la NBA o los dueños para detener el cambio.

Fischer reconoció que el ingreso de Paul a Lakers lo afectaría personalmente porque tendría a un jugador de gran calidad y de la misma posición, uniéndose al equipo.

No debe haber razones arbitrarias por las cuales un jugador no pueda ser cambiado si dos o tres equipos están de acuerdo y esto se establece en los parámetros del convenio colectivo, precisó Fischer, de 37 años, con cinco títulos de campeón con el conjunto angelino.

Ajeno a todo el entramado, el base de Nets de New Jersey, Deron Williams, llamó matón a Stern por la forma en que impidió el ingreso de Paul a Lakers: Creo que todo mundo sabe eso y no se puede ir contra él, ni contra el resto de los dueños de la NBA y de los grandes negocios.

El caso Paul, finalmente cedido a Clippers de Los Ángeles para disminuir la tensión, multiplicó las críticas hacia Hornets, bajo propiedad mayoritaria de la NBA y por ende de la decisión de Stern.

Presentan a Ayón

El mexicano Gustavo Ayón fue presentado este viernes con el equipo de Nueva Orleáns y asumió el reto de que deberá acostumbrarse lo antes posible al baloncesto de la NBA, luego de su incursión en España.

Debo adaptarme al sistema del equipo y luego a la liga porque físicamente son muy buenos. Este basquetbol de la NBA no lo he jugado, los primeros días me daré cuenta de lo que me hace falta y trabajaré para mejorarlo, dijo Ayón, quien firmó por tres temporadas.

El jugador fue bien recibido por sus compañeros y por su entrenador Monty Williams, aunque desconoce cuándo podría ser considerado en la alineación. El coach sólo me dio la bienvenida. Hay que esperar la oportunidad, no sé si esté disponible para el lunes o el juego de Boston en casa.

El nayarita, quien portará el número 15 y desea jugar como delantero de poder, no se mostró preocupado por el pago de un millón de dólares al Fuenlabrada español, que se supone él deberá cubrir, aunque parte del adeudo sería pagado por patrocinadores del equipo.

Pagaré con mi sueldo ese millón de dólares, pero no creo que eso cause ningún problema. Ahora lo que me toca es trabajar y luego vendrá lo económico, aclaró.

A Ayón le entusiasma enfrentar a su compatriota Nájera, quien se recupera de una operación y regresaría a las duelas en enero.

Será un buen momento para el basquetbol mexicano, para demostrar que podemos hacer bien las cosas, consideró.

Durant, por el trono

Con solo 23 años y líder anotador en las dos recientes temporadas, el alero de Oklahoma City Thunder, Kevin Durant, amenaza el trono que ostentan LeBron James y Kobe Bryant, los dos mejores jugadores de la NBA.

Con menor fortaleza que James e inferior explosividad que Bryant, Durant los aventaja en estatura y juventud y ya ha establecido algunas marcas que no consiguieron en sus inicios los otros dos superastros.

Seleccionado por Supersonics de Seattle en el draft de 2007, Durant conquistó el reconocimiento de novato del año en su primera temporada, resultado de 20.3 puntos y 2.4 asistencias.

Un año después, cuando el equipo se trasladó a Oklahoma y tomó el nombre actual, elevó sus medias a 25.3 tantos y 6.5 rebotes por partido. Como prueba de su progreso fue proclamado mejor jugador del partido de Novatos, al anotar 46 puntos en el desafío.

La campaña 2009-2010 significó su consagración, además de convertirlo en figura insignia y líder ofensivo del plantel. Promedió 7.6 rebotes y 30.1 tantos, que le depararon el primer título de máximo anotador del certamen.