Miércoles 21 de diciembre de 2011, p. 39
Bruselas, 20 de diciembre. La Unión Europea (UE) fortaleció el martes los controles a las exportaciones de fármacos que pueden ser usados en la aplicación de la pena de muerte, agravando más la escasez de suministro que ha demorado las ejecuciones en Estados Unidos.
La medida significa que las firmas europeas que producen fármacos, como tiopental sódico –sedante legal usado en las inyecciones letales–, deberán otorgar garantías de que sus productos no serán aplicados en ejecuciones si desean exportarlos.
A partir de hoy, el comercio de ciertos anestésicos, como tiopental sódico, que puede ser usado en inyecciones letales, a países que aún no han abolido la pena de muerte, será estrictamente controlado
, indicó un comunicado de la Comisión Europea.
La pena de muerte está prohibida en la Unión Europea y desde 2008 el bloque de 27 miembros viene reclamando su abolición en todo el mundo. Firmas en Gran Bretaña, Italia, Alemania, Austria y Dinamarca son las principales fabricantes de tiopental sódico.