Monterrey, 3 de diciembre. Los Tigres de la UANL saltarán este domingo a la cancha del Volcán con la obligación de mostrar un juego más ofensivo que en la semifinal de ida (0-0), pero también con la intención de contener a unos motivados Gallos Blancos que buscan dar otro campanazo que los instale en la gran final.

Los queretanos ven la tierra prometida tan asequible que prometieron jugar como perros, precisó el portero Liborio Sánchez. El duelo será parejo, pues mientras los Gallos cuentan con el goleador uruguayo Carlos Bueno, los norteños tiene al argentino Lucas Lobos, el gran ídolo de la afición felina.

Queremos matar, el equipo está completamente convencido de que debemos salir como perros para ganar todas las pelotas y las zonas del terreno de juego, pero sobre todo para hacer un gol en los primeros minutos y bajar la intensidad del estadio, dijo Liborio.

El portero comentó que esperan a un Tigres afanado en defender su marco y con la intención de aprovechar los contragolpes para finiquitar el partido. Tienen la ventaja y la posición en la tabla, pero hay que estar tranquilos, hacer el juego que hemos desarrollado y eso nos bastará para sacar el marcador... Ellos tienen buen plantel, pero nosotros mucha sed de victoria, puntualizó Sánchez.

El defensa felino Israel Jiménez consideró que la táctica fija de Gallos es una de sus principales armas. Tiene buena defensa, es difícil meterle gol, pero también trabaja bien la táctica fija, advirtió, luego del entrenamiento a puerta cerrada que realizó hoy el conjunto dirigido por Ricardo Ferretti.

El equipo está muy metido en lo que queremos y estamos esperando el partido del domingo contra Querétaro. Debemos mantener la humildad y esperar el encuentro con mucha emoción, dijo Jiménez, quien espera una mejoría en el plantel regiomontano, tras explicar que el jueves les afectó la mala condición del césped del estadio La Corregidora.

El partido de ida finalizó sin goles y avanzará a la final el que gane este cotejo; en caso de empate en el global, el boleto será para la UANL por su mejor posición en la tabla general.

La barra de Tigres, Libres y Lokos, organiza el pasillo de la esperanza, una valla al equipo rumbo al estadio, así como pintas de cabello con los colores azul y amarillo.