México y Estados Unidos enfrentamos riesgos asimétricos que amenazan con propagarse, por lo que la experiencia acumulada nos demanda trabajar de manera conjunta para coordinar esfuerzos y actuar en estricto respeto de las leyes y la soberanía, afirmó el secretario de Marina, almirante Mariano Francisco Saynez Mendoza. Agregó que la manera coordinada en que ambos países han desarrollado acciones contra organizaciones criminales trasnacionales son el reflejo del interés compartido para enfrentar y combatir los riesgos que éstas generan.

A su vez, el embajador de Estados Unidos, Anthony Wayne, dijo que la cooperación bilateral que representa la Iniciativa Mérida fortalece la relación entre dos naciones hermanas, siempre con pleno respecto a la soberanía, jurisdicción territorial y marco legal.

Los funcionarios encabezaron ayer la ceremonia realizada en el hangar de la Secretaría de Marina, en la que el gobierno de Estados Unidos entregó a la Armada de México el primero de cuatro aviones Casa 235 Persuader para patrullaje marítimo y tres vehículos de inspección no invasiva de rayos x para la detección de explosivos, drogas, personas y sustancias peligrosas.

El diplomático agregó que en los tres años de vigencia de la iniciativa, México ha recibido 700 millones de dólares en equipo y capacitación para las fuerzas armadas y federales que combaten al crimen organizado. Y confió en que este programa no concluya aquí.

Aseguró que la entrega del material es una clara representación de la cooperación bilateral entre las dos naciones en su lucha contra la delincuencia internacional. Las amenazas no se detienen en la frontera, pero tampoco nuestra capacidad de colaboración.

Todos conocen la situación que amenaza la seguridad de las dos naciones y por eso, dijo Wayne, compartimos la misma visión estratégica.

Saynez señaló que México tiene sus límites territoriales perfectamente definidos, pero eso no nos limita a mantener una estrecha relación con los países vecinos y la comunidad internacional, basada en la confianza y el respeto mutuo.

Aseguró que en los hechos ha quedado demostrado que el intercambio de información, de inteligencia y la interoperatividad con que han trabajado México y Estados Unidos han vulnerado la composición del crimen organizado internacional.

El secretario de Marina destacó ante Wayne y funcionarios de la cancillería y la embajada de Estados Unidos que la aeronave recibida viene a sumarse a la labor que desarrollan el resto de nuestras unidades aéreas del mismo tipo (la Armada compró recientemente dos aviones Casa 235 Persuader), las cuales han sido utilizadas exitosamente en operaciones de vigilancia marítima para el mantenimiento del estado de derecho en el mar y en apoyo a la población civil en casos de desastres naturales.

El avión CN-235, de fabricación española, está presurizado, es bimotor con turbohélice, ala alta y tren retráctil; además, cuenta con aviónica de última generación, equipo de misión que integra las señales de radar de vigilancia y una cámara FLIR, lo que le permite realizar acciones de vigilancia y búsqueda.

Gracias a las ocho horas de autonomía y la velocidad crucero de 180 nudos que desarrolla, la aeronave incrementará los niveles de seguridad en el mar territorial y en la zona económica exclusiva, dijo Saynez.