Lunes 21 de noviembre de 2011, p. 19
San Cristóbal de Las Casas, Chis., 20 de noviembre. Mil 500 productores de miel del sureste del país exigieron al gobierno federal que frene la siembra de semillas transgénicas de maíz y soya, porque “si no se toman medidas radicales se avecina una catástrofe para miles de pequeños apicultores.
Estamos muy preocupados por el factor económico, ambiental y social, por el impacto que tendrán los transgénicos en la apicultura
, dijeron durante su asamblea anual en El Colegio de la Frontera Sur (Ecosur), con sede en esta ciudad.
Agrupados en la Integradora de Organizaciones Apícolas del Sureste, que aglutina a mil 452 productores que generan mil 539 toneladas de miel anuales, de las cuales exportan a Europa 90 por ciento, los productores afirmaron que están tejiendo alianzas con organizaciones ambientalistas nacionales e internacionales, con universidades y movimientos sociales para encarar el problema.
Miguel Ángel Murguía, miembro de una red de 20 cooperativas de Yucatán, aseguró que el gobierno federal autorizó la siembra de 30 mil hectáreas de soya transgénica en la península, donde la planicie facilitará que el viento esparza el polen y contamine las colmenas.
Si no se toman medidas radicales se avecina una catástrofe para muchos de los 40 mil pequeños productores
en el país –de éstos 25 mil están en la península– que generan entre 40 mil y 50 mil toneladas al año, reiteró.