Nueva York. La administración del presidente Barack Obama ha ampliado durante los últimos meses el número de auditorías que realiza a empresas sospechosas de emplear inmigrantes indocumentados, de acuerdo con el diario The Wall Street Journal. En el año fiscal que terminó el 30 de septiembre pasado, el gobierno auditó dos mil 496 compañías, en tanto el año fiscal previo había realizado dos mil 196 auditorías. Asimismo, tan sólo en las semanas recientes, el gobierno ha notificado a 500 empresas de que serán auditadas, según el diario. Las auditorías provocan que las empresas pierdan grandes números de empleados, bajen productividad y paguen enormes costos por servicios legales; pueden conducir, igualmente, a que las autoridades presenten cargos penales contra los empleadores, además de que las empresas que contratan indocumentados pueden ser vetadas para concursar por contratos del gobierno. La nota destacó que a diferencia de otras acciones para hacer cumplir la ley, esta última ronda de auditorías no fue anunciada por el gobierno para, presumiblemente, no llamar la atención sobre políticas que puedan incomodar a los votantes hispánicos de cara a las elecciones de 2012.