Recaba firmas para que se derogue ley que penaliza el aborto
Domingo 6 de noviembre de 2011, p. 34
El aborto está prohibido en cualquier circunstancia. No se aplica cuando el embarazo es resultado de una violación, ni si la vida de la madre está en peligro. Esta es la realidad de las mujeres en Nicaragua, lo que para Amnistía Internacional (AI) constituye grave violación a los derechos humanos de la población femenina.
Para solicitar al gobierno del país centroamericano que tome medidas para proteger a niñas y mujeres frente a la violencia sexual, el organismo internacional recaba firmas que luego distribuirá en las embajadas de Nicaragua en diferentes países. El viernes entregó la petición signada por más de 5 mil mexicanos.
Éstas se sumaron a las más de 70 mil recolectadas en otras naciones, las cuales ya han sido entregadas a las autoridades nicaragüenses. La misiva solicita el diseño y aplicación de un plan nacional para abordar el problema de la violencia sexual y garantizar un adecuado acceso a la justicia para quienes han sido víctimas de este hecho.
También pide la derogación de la ley que penaliza el aborto en todos los casos y que ubica a ese país como el único de América que penaliza la interrupción del embarazo en aquellos casos de violación y cuando la vida de la madre corre peligro.
Este ordenamiento entró en vigor apenas en 2008 y su rigidez es tal que prohíbe a mujeres embarazadas el acceso a tratamientos médicos –tales como quimioterapia– que pueden poner en riesgo la salud del feto, sin importar si estas terapias son la única esperanza de vida para la madre.
De acuerdo con cifras oficiales, entre 1998 y 2008 se denunciaron más de 14 mil casos de violación en Nicaragua, de los cuales, en dos terceras partes, las víctimas eran menores de 17 años. Más grave aún es el dato de que en 2010 se registraron tres mil 778 denuncias de abusos sexuales, y 39 mujeres y niñas fueron asesinadas, refirió Amnistía Internacional.
El organismo organizó manifestaciones en ocho ciudades de México durante las semanas pasadas, en las cuales dio a conocer la situación de las nicaragüenses.
Amnistía Internacional resaltó la importancia de que las peticiones se hayan entregado antes de las elecciones que tendrán lugar este domingo en Nicaragua, porque el nuevo gobierno deberá asumir numerosos retos y problemas, entre ellos garantizar el pleno ejercicio de los derechos de niñas y mujeres.