México ocupa el cuarto lugar mundial en biodiversidad; sin embargo, su sistema para proteger especies en riesgo sólo cumple con la mitad de las características deseables, de acuerdo con una evaluación de 25 sistemas normativos en el Continente realizada por la organización Servicios Ambientales, Conservación Biológica y Educación (Sacbe).

Su director, Alfredo Cuarón, explicó en entrevista previa a su participación en el seminario de divulgación sobre la Norma Oficial Mexicana 059 que, de acuerdo con los resultados, el mejor sistema es el de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza y todos los métodos nacionales, salvo el de Canadá, tienen serias deficiencias.

En el caso de México, dicho sistema es la NOM-059 y está sujeta en trampas administrativas, burocráticas y políticas, por lo que es necesario que se independice y en vez de que sea una sola haya tres listados.

Así, un primer listado de especies en riesgo apuntaría a qué nivel de amenaza tienen las especies, un segundo incluiría especies prioritarias que incluyan otros criterios, como su importancia cultural, económica o ecológica, y un tercero sería jurídico-administrativo, es decir, normas que determinen la tasa de aprovechamiento de las especies.

Además, dijo, habría que modificar el método que se utiliza para categorizar a las especies en México, toda vez que el vigente tiene muchas deficiencias y vulnera las herramientas de la sociedad para planificación y manejo ambiental.