Expertos demandan programas eficientes
crisis civilizatoria
Domingo 6 de noviembre de 2011, p. 13
La grave caída de la producción de granos básicos en México –como recién alertó la Organización de Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO)–, forma parte de una crisis civilizatoria
más profunda, que debe ser combatida con programas productivos eficientes, en vez de sólo mantener esquemas asistenciales para mitigar la pobreza.
Tal fue la advertencia que lanzaron especialistas de la Universidad Nacional Autónoma de México en temas agrícolas, quienes coincidieron en que el abandono económico del sector, los efectos del calentamiento global y la alta cotización de ciertos productos como biocombustibles son algunos de los factores que han propiciado esta situación.
Argelia Salinas, académica del Instituto de Investigaciones Económicas (IIE), explicó que la caída de la producción de granos en el país –de 8.5 por ciento respecto de 2010–, se inscribe en lo que algunos teóricos llaman una crisis civilizatoria
, causada por la falta sistemática de inversión en el campo; la dependencia de la economía mexicana en general; el cambio climático y el precio distorsionado del maíz, debido a su potencial para generar etanol.
El campo mexicano incluso daba para exportar a Estados Unidos, pero a partir de los años 70 asistimos a una crisis recurrente que se ha acentuado en los últimos 30 años, debido a que la inversión sectorial es muy baja para los programas productivos, y sólo tenemos esquemas de apoyo social de carácter paliativo, para mitigar la extrema pobreza
, explicó la integrante de la unidad de investigación sobre el sector primario.
Para combatir la problemática es necesario que las autoridades dediquen una buena inversión al campo mediante subsidios directos e indirectos, ya que en la actualidad 75 por ciento de los granos básicos se producen en zonas de temporal y sólo 25 por ciento en áreas de riego, que ya están mermadas y no rinden lo suficiente.
De aplicarse medidas efectivas, dijo, podría duplicarse la cosecha de maíz hasta llegar a 50 millones de toneladas, sin necesidad de utilizar transgénicos, y así resolver el problema de la alimentación, el más grave para la humanidad.
Felipe Torres Torres, también del IIE, consideró que la baja en la producción de granos puede llegar a ser de entre 30 y 40 por ciento, debido a la sequía en Sonora, Chihuahua y Coahuila; las heladas en Sinaloa, y las inundaciones en Veracruz y Chiapas; ello sumado a la falta de inversión productiva.
Aunque el presupuesto federal para el campo ha aumentado en los años recientes, eso no ha repercutido en mayor producción de granos, porque sólo operan apoyos de asistencia social
, indicó.
Otros factores que inciden en la baja producción son el aumento de precios de granos usados para generar etanol, como el trigo y el maíz; los flujos migratorios que afectan a algunas zonas de actividad campesina, y el reciente consumo masivo de países como China, India y Rusia.