En medio de cabilderos que intentaron frenar la legislación e incluso ingresaron al salón de sesiones, el Senado aprobó ayer reformas a la Ley General de Salud en materia de donación de órganos, para agiliza este procedimiento y el de trasplantes. Se precisa en la norma que en caso de fallecidos que no hayan expresado por escrito su negativa a que se les extirpen sus órganos, un familiar podrá autorizarlo.

Con los cambios aprobados a la Ley General de Salud, igualmente se podrá disponer de órganos y tejidos de cadáveres de quienes estuvieran relacionados con averiguaciones previas o delitos, siempre que lo autorice el Ministerio Público, cuando se desconozca su identidad o no haya forma de localizar a sus parientes.

La ley, sin embargo, prevé sanciones para quienes extraigan órganos de forma ilegal en hospitales y depósitos, cuyas multas van de 10 mil a 17 mil días de salario mínimo.

Durante la discusión de las reformas a dicha ley, el presidente en funciones de la mesa directiva, el panista Ricardo García Cervantes, tuvo que llamar al orden, ya que algunos cabilderos habían ingresado al pleno y presionaban a senadores para que la minuta se regresara a la Cámara de Diputados, ya que sus clientes no están de acuerdo en que se abra el mercado de los hemoderivados –sangre reciclada– a empresas trasnacionales.

El presidente de la Comisión de Salud, Ernesto Saro, declaró haber visto cuando uno de los cabilderos, Marco Antonio Michel Díaz, presidente de Políticas Públicas y Asesoría Legislativa, entregaba tarjetas a los senadores del PRI para que regresaran la minuta o reservaran el punto referente a los hemoderivados, pues no quieren que se abra ese mercado a trasnacionales.

Precisó que los hemoderivados aluden a la sangre reciclada que utilizan hemofílicos y pacientes que requieren diálisis, personas que sufrieron quemaduras y necesitan un tipo de sangre poco común.

Francisco Arroyo Vieyra, senador del PRI, dijo en tribuna que “en este momento en el país hay una sola empresa que se dedica al reciclamiento de esa sangre, porque trabaja con un amparo, esto nos parece perverso y poco prudente.

Me comprometo, junto con varios de ustedes, a que una vez que sean promulgadas las reformas, presentemos una iniciativa para buscar que la industria farmacéutica nacional venga a ocupar un nicho del mercado que le corresponde.

Saro recalcó que no era posible tal reserva, porque ello va en contra de acuerdos y tratados internacionales. Por ello, pidió al tricolor no presentar la reserva, ya que hoy tenemos que importar los hemoderivados de Estados Unidos, Venezuela y Argentina.

Los cambios a la Ley General de Salud contienen el principio llamado de donación tácita, que expresa la posibilidad de que los mexicanos sean donadores de manera universal, salvo cuando se especifique lo contrario, siempre dando la facultad y la potestad a la familia en el momento determinante.

En tribuna, el senador Saro destacó que hay más de 15 mil personas en espera de un transplante y hay solamente 4 mil órganos disponibles cada año, mientras la lista crece y cada vez hay más personas a la espera de una donación.