Beirut, 25 de octubre. El gobierno sirio convirtió los hospitales en instrumentos de represión contra opositores al presidente Bashar Assad, acusó hoy Amnistía Internacional (AI).

Los pacientes heridos en al menos cuatro hospitales gestionados por el gobierno son sometidos a tortura y otro tipo de abusos, incluso por parte del personal médico, señaló el grupo defensor de los derechos humanos con sede en Londres.

Es profundamente alarmante que las autoridades sirias parezcan haber dado rienda suelta a las fuerzas de seguridad en los hospitales y que en muchos casos el personal hospitalario parezca estar participando en la tortura de personas a las que supuestamente debería cuidar, señaló Cilina Nasser, investigador de Amnistía Internacional para Medio Oriente y el norte de África.

Los pacientes fueron atacados por personal médico y de seguridad en hospitales de Banias, Homs y Tel Kalakh, así como en hospitales militares en Homs, según AI.

Las autoridades sirias deben actuar urgentemente para asegurar que todos los pacientes reciben el mismo trato sin discriminación basada en sus actividades o lealtades políticas, añadió.

Un activista sirio señaló que el gobierno detuvo a más de 30 mil personas en las redadas realizadas desde las revueltas de mediados de marzo. El presidente Bashar Assad ha convertido todos los estadios de futbol del país en prisiones, señaló Radwan Ziadeh, cofundador del Centro para los Derechos Humanos de Damasco.

La ONU estima que el conflicto ha dejado más de 3 mil muertos.