Naucalpan, Méx., 25 de octubre. “La micro iba muy fuerte. Yo creo que (el chofer) no la pudo controlar y salió volando a la barranca”, narró María Elena Valillo Molina, de 43 años, después de abandonar el área de urgencias del hospital de traumatología del Instituto Mexicano del Seguro Social en Lomas Verdes.

Ella fue una de las 20 personas lesionadas la mañana del lunes, cuando un microbús volcó y cayó a un barranco de 25 metros de profundidad en Huixquilucan. Hubo 11 muertos, entre ellos un menor de edad.

En silla de ruedas y con cuatro costillas fracturadas, apenas podía hablar. Tendrá que usar oxígeno mientras sanan sus heridas.

Horas después del accidente, la Agencia de Seguridad Estatal afirmó que el accidente de la unidad de la ruta 4, conducida por Bonifacio Mar García, fue por exceso de velocidad o una falla mecánica.

Juan Carlos Solís, de 31 años, fue uno de los pocos lesionados que el mismo día del percance fueron dados de alta. Comentó que es habitual que las unidades de transporte público rebasen los límites de velocidad en la carretera Naucalpan-Huixquilucan.

Eso es normal, pero esta vez pasó algo. De pronto el microbús comenzó a zigzaguear, cayó en la cuneta y salió de la carretera, hacia el barranco, explicó.

Personal de la Procuraduría General de Justicia del Estado de México informó que la víctima mortal número 11 fue identificada como María de Jesús Fuentes Hernández, estudiante de 16 años.

Por la tarde, el chofer fue trasladado al centro de justicia de Naucalpan para rendir declaración.

El secretario de Transporte del estado, Jaime Barrera Velázquez, informó que sólo si los peritajes de la Procuraduría estatal concluyen que el accidente se debió a la imprudencia del operador, la dependencia podrá retirar la concesión.

Señaló que la unidad accidentada forma parte de la flotilla de la empresa Asociación de Propietarios y Transportistas de Huixquilucan, que posee 140 concesiones.

Explicó que los representantes legales de la compañía aseguraron que se indemnizará con 130 mil pesos a las familias de cada uno de los 11 fallecidos.

Además, la empresa cuenta con un seguro de cobertura amplia para pagar los gastos médicos de los hospitalizados.

Pese a los constantes accidentes de unidades de transporte público, Barrera Velázquez dijo que el servicio en la entidad es seguro y los percances son mínimos.

La mañana de este martes, una joven de 24 años que se dirigía a su trabajo fue arrollada por un autobús de la línea Colón Nacional, en el centro de Toluca. La muchacha murió cuando recibía atención médica.

En Ecatepec, un pasajero fue asesinado al resistirse a ser asaltado por tres sujetos cuando viajaba en un autobús de la línea México-Tizayuca que circulaba por la vía Morelos.