Pide más declaratorias de emergencia; SG reconoce menos de un tercio de los damnificados
Estragos en 7 mil viviendas, 290 escuelas, 30 clínicas y 350 mil hectáreas
Habitantes de Cárdenas bloquean carretera para demandar ayuda
Familias rechazan trasladarse a los refugios
Miércoles 19 de octubre de 2011, p. 34
Villahermosa, Tab., 18 de octubre. Daños en 16 de los 17 municipios (más de 350 mil hectáreas de pastizales y cultivos siniestrados, 7 mil 500 viviendas, 290 escuelas y 30 unidades médicas inundadas; apagones, deslaves y cortes en carreteras), 130 mil damnificados y 18 mil alumnos sin clases han dejado hasta ahora las torrenciales lluvias de días recientes, que provocaron el desbordamiento de siete ríos.
La Comisión Nacional del Agua (Conagua) pronosticó para este miércoles el desplazamiento del frente frío 7 hacia el sureste del Golfo de México, lo que causaría lluvias de fuertes a muy fuertes.
El gobernador Andrés Granier Melo advirtió que en las presas del alto Grijalva la situación también es crítica, pues la de Malpaso está casi tres metros por arriba de su curva guía, por lo cual se incrementó la extracción de la presa Peñitas a mil 500 metros cúbicos por segundo.
Granier demandó a la Federación que ocho municipios más sean declarados en emergencia (la semana pasada ocho se encontraban en esa condición), así como acelerar la declaratoria de desastre para los municipios de Jonuta, Balancán, Tenosique, Emiliano Zapata y Centla, devastados por las aguas del río Usumacinta.
Al presidir la sesión del Consejo Estatal de Protección Civil, en compañía de Laura Gurza, coordinadora general de Protección Civil de la Secretaría de Gobernación (SG), el mandatario planteó, a fin de obtener más ayuda federal, que se reconsidere el número de damnificados, pues la Federación sólo reconoce 37 mil.
Cárdenas, Cunduacán, Cárdenas, Huimanguillo y Paraíso, en la región de La Chontalpa, fueron declaradas en contingencia luego que los aguaceros del lunes inundaron colonias y comunidades. Este martes el Ejército activó el Plan DN-III.
En Cárdenas, donde en las 48 horas recientes hubo precipitaciones de 410 milímetros, las cuales anegaron la ciudad, unas 80 personas bloquearon una avenida para exigir a las autoridades resolver problemas de drenaje.
Este año, poblaciones de las cuatro regiones de la entidad: (centro, Chontalpa, sierra y ríos) han resultado perjudicadas por inundaciones. Los ríos La Sierra, Tulijá y Puxcatán (clasificados como cauces sin control porque carecen de presas) mantienen anegadas comunidades de Jalapa, Teapa y Macuspana; en este último municipio hay más de 5 mil damnificados.
En el municipio de Centro, cuya cabecera es Villahermosa, el alcalde Jesús Alí pidió a la SG declaratoria de emergencia, pues hay más de 9 mil afectados de 37 localidades y 2 mil 396 casas inundadas. Las anegaciones se atribuyen al río Viejo Mezcalapa, fuera de cauce.
Poblaciones de Nacajuca, Jalpa de Méndez, en La Chontalpa chica, permanecen inundadas desde septiembre. En esa región suman mil 940 viviendas anegadas y 5 mil personas afectadas en 33 comunidades.
Los pobladores atribuyen las inundaciones a los desfogues de la presa Peñitas, cuyas aguas llegan al río Samaria, que bordea comunidades de los municipios citados.
La región más perjudicada es la de los ríos, donde las autoridades aún evalúan los daños. Han sido desplazadas 159 mil reses debido al desbordamiento del Usumacinta, que bordea Tenosique, Balancán, Jonuta, Emiliano Zapata y Centla.
En esta demarcación, limítrofe con Guatemala, el río salió de cauce por las lluvias y los escurrimientos provenientes de Guatemala y el norte de Chiapas.
Casi todo Jonuta ha sufrido estragos y 43 mil de sus 56 mil habitantes han sido alcanzados por las aguas. En ese municipio, unos 18 mil alumnos no reciben clases debido a que 290 planteles quedaron entre el agua.
Rafael Argaez, funcionario de protección civil municipal, refirió que sólo mil 500 personas se encuentran en 20 refugios, mientras 3 mil 500 están con familiares. Dijo que la mayoría de los pobladores no quiere abandonar sus propiedades y prefieren permanecer en tapescos (plataformas hechas con madera).
En Balancán, las autoridades reportaron 40 comunidades y 43 comercios anegados, en perjuicio de mil 752 familias. Se habilitaron 15 albergues, pero sólo 323 personas de 87 familias acudieron.
Los ríos que están por arriba de su nivel máximo son el Usumacinta (por 2.27 metros), Samaria (1.17), Grijalva (1.09), Pichucalco (1.14), Puxcatán (37 centímetros), Tulijá (2) y La Sierra (75).
El municipio de Palizada, Campeche, quedó incomunicado ayer por vía terrestre con Tabasco, al colapsar una alcantarilla en el kilómetro 2 del tramo carretero federal Palizada-Jonuta, a causa del desbordamiento de los ríos Palizada y Río Viejo. En varios tramos de la carretera federal Santa Adelaida-Palizada el agua alcanza 30 centímetros.
Con información de Lorenzo Chim, corresponsal