Al admitir que tenía conocimiento de que Nextel y Teléfonos de México (Telmex) no explotan los 50 megahercios (Mhz) que tienen cada una en la banda de 3.4-3.7 gigahercios (Ghz) y no haber hecho nada al respecto, el presidente de la Comisión Federal de Telecomunicaciones (Cofetel), Mony de Swaan incurrió en una irresponsabilidad como funcionario público y deberá responder por ello ante la Secretaría de la Función Pública (SFP), advirtió el vocero de Grupo Iusacell, Luis Niño de Rivera.

Destacó que ayer se entregó la denuncia correspondiente y solicitud de revocación de títulos de concesión ante la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), y que se hará ante la Cofetel acompañada de una prueba pericial para demostrar que Nextel miente cuando afirma que sí está usando el espectro.

Grupo Iusacell dio a conocer que Telmex y Nextel tienen bajo concesión 50 Mhz cada uno en la banda de 3.4-3.7 Ghz que sirven para ofrecer servicios de telefonía fija y móvil, y que la primera tiene 10 años con la concesión, sin que haya hecho uso de ese bien público y la segundo al menos cinco años en iguales circunstancias, con lo que violan sus respectivos títulos de concesión en lo que se refiere a que tienen 180 días para iniciar la explotación del espectro.

Niño de Rivera señaló que ayer el presidente de la Cofetel admitió que conocía del caso y que el órgano regulador no ha hecho nada para que las empresas cumplan con sus obligaciones. Coincido plenamente, Nextel no hace uso apropiado de la banda (3.4-3.7), con una noticia adicional: no sólo Nextel, Telmex tampoco hace un uso cabal del espectro en esta banda. Están sentados sobre el espectro de manera que en efecto habría que tomar medidas al respecto. Lamentablemente no se han tomado.

Niño de Rivera señaló que la SFP debe iniciar una investigación para fincar responsabilidad a Mony de Swaan y demás funcionarios que resulten responsables, y de forma complementaria Grupo Iusacell presentará una denuncia ante esa dependencia.

Detalló que la solicitud de revocación de títulos de concesión que presentará a la Cofetel irá acompañada de una prueba pericial para comprobar que Nextel no ha usado el espectro, por lo que está incurriendo en acumulación indebida y especulación.

Cofetel está capturado

Autorizar a las televisoras el multiplexeo de canales digitales a través de una simple toma de nota pone en evidencia la captura de la que es sujeto el presidente de la Comisión Federal de Telecomunicaciones (Cofetel), Mony de Swaan, afirmó la consultoría Mediatelecom, al destacar que las medidas adoptadas por el órgano regulador para lograr la transición a la televisión digital terrestre sólo provocarán la mayor concentración de señal en dos empresas y van en contra de cualquier modelo democrático de comunicación.

Los consultores de Mediatelecom señalaron que la toma de nota a través de la cual el pleno de la Cofetel autorizó el 20 de junio pasado la multiprogramación o multiplexeo a favor de Milenio Televisión, Televisa y el Organismo Promotor de Medios Audiovisuales es un procedimiento que no está contemplado en al Ley Federal de Radio y Televisión (LFRT) ni en el reglamento Interior de la Cofetel, y aunque el presidente de la Cofetel, Mony de Swaan lo afirme, tampoco está en el acuerdo y decreto de transición a la televisión digital terrestre (TDT).

Sin embargo, señaló la consultoría, no todo es responsabilidad de la Cofetel, sino que también debe atribuirse a la impericia del propio Ejecutivo federal al decretar la política de TDT de 2010, al obstruccionismo por el Congreso y la indefinición de los magistrados, por lo que la Cofetel toma decisiones controversiales a partir de la política de 2004 que el propio Ejecutivo reconoce como ineficaz e insuficiente para conducir ese importante proceso de transformación tecnológica.

“La multiprogramación sí acentúa la concentración de recursos comunicacionales. Si la Cofetel reconoce que el mercado de la televisión abierta está concentrado y que las que usufructúan el espectro radioléctrico son Televisa y Televisión Azteca, resulta inaceptable admitir que esa concentración de facto no se agudiza con la posibilidad de multiplicar las señales, sobre todo cuando no hay ninguna estrategia regulatoria ni reglamentación para permitir esa multiprogramación, la Cofetel no fijó ninguna contraprestación para que las empresas accedieran al multiplexeo y tampoco verificó que cumplan con su concesión”.