Pemex Refinación (PR) otorgó una ampliación del plazo hasta el 31 de enero de 2012 para que las estaciones de servicio que no lo han hecho suscriban el nuevo contrato de ventas de primera mano. El plazo inicial vencía el 30 de septiembre y se había amagado a las estaciones que no se adhirieran al nuevo contrato con suspender el suministro de hidrocarburos.

El citado contrato elimina la exclusividad para que las gasolineras distribuyan los combustibles, e incorpora la figura de un tercero para el almacenamiento, distribución, venta y autoconsumo de petrolíferos.

Sin embargo, la Asociación Mexicana de Empresarios Gasolineros (Amegas) interpuso una controversia constitucional ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación, para que el Estado no abandone sus responsabilidades plasmadas en el artículo 27 constitucional y se respete absolutamente el marco jurídico que regula los hidrocarburos.

Con las recientes reformas en materia de distribución y comercialización, el gobierno permitirá que una persona física o moral pueda adquirir directamente de Pemex Refinación petrolíferos para su almacenamiento, distribución y autoconsumo. Esto, dicen los gasolineros perjudicará su negocio.

Los gasolineros organizados señalaron que estas medidas son ilegales porque los contratos anteriores que permiten la exclusividad para la distribución y venta de hidrocarburos todavía son vigentes, además de que estas nuevas disposiciones incentivarán el mercado ilícito de combustibles.

Pemex Refinación señaló que las estaciones de servicio que quieran beneficiarse de la ampliación del plazo para la firma del nuevo contrato de ventas de primera mano envíen una carta a Pemex antes del 31 de octubre de 2011, en la que se comprometen a signar el nuevo documento antes del 31 de enero de 2012.

Al respecto, el diputado César Augusto Santiago Ramírez aseguró que Pemex está iniciando un proceso de privatización en la distribución de los combustibles de la marca Pemex para las 10 mil estaciones de servicio o gasolineras que hay en este país.

Agregó: Doy simplemente dos datos. Se trata de 10 mil empresas de mexicanos que acudieron a comprar su franquicia en los términos que dijo Pemex y que están dando el servicio de venta de gasolina en todo el país. El otro es que estamos hablando de 182 millones de litros de estas gasolinas y diesel que se distribuyen diariamente en México.

El legislador dijo: Hemos señalado los costos adicionales que va a representar para el país este nuevo sistema de distribución, que es un perverso proceso de privatización que de manera soterrada está iniciando Pemex con el contrato de venta de primera mano.