Los inversionistas extranjeros retiraron en septiembre pasado alrededor de 4 mil 650 millones de dólares que estaban invertidos en bonos gubernamentales. Éste fue el mayor retiro mensual de financieros extranjeros en los últimos dos años, según reportes del Banco de México (BdeM).

En tanto, el peso registró, en ese mismo mes, una devaluación de 12.5 por ciento. Los analistas ya empezaron a ajustar al alza las expectativas de cotización del peso mexicano que, consideraron, continuará en los próximos días en niveles superiores a 14 pesos.

Los informes del banco central revelan que sólo en las semanas del 9 de septiembre (cuando los inversionistas extranjeros alcanzaron el mayor monto de recursos invertidos en bonos gubernamentales), y el 22 de septiembre, salieron del mercado unos 44 mil 612 millones de pesos, que a un tipo de cambio promedio de 13.18 pesos, representó una fuga de capitales de 3 mil 384.8 millones de dólares.

Los datos del BdeM detallan que el monto de recursos de inversionistas del exterior en valores del gobierno pasó de 923 mil 149 millones de pesos alcanzados el 9 de septiembre a 878 mil 537 millones al 22 de septiembre de este año. Es decir, 44 mil 612 millones de pesos buscaron refugio en instrumentos de mayor seguridad, como bonos del Tesoro estadunidense o metales.

A este monto se sumó una salida de recursos adicional por 16 mil 722 millones de pesos, unos mil 268.7 millones de dólares, en la semana del 26 al 29 de septiembre, según las estimaciones del grupo financiero BBVA-Bancomer.

Según los analistas, destaca la venta de plazos medios y largos. Con estas estimaciones, el flujo de extranjeros del mes será cercano a cero o ligeramente negativo.

Los especialistas del grupo financiero Scotiabank advirtieron que de presentarse algún acto negativo del entorno global, como un posible incumplimiento desordenado de Grecia, podría detonarse una salida de flujos que propiciara un repunte tanto en la paridad cambiaria como en las tasas de interés.

Simultáneamente a la salida de capitales del llamado mercado de dinero, se registró entre el primero y el 22 de septiembre una devaluación de 155 centavos, la mayor para un sólo mes en los últimos dos años. La depreciación del peso mexicano en el periodo de referencia fue equivalente a 12.5 por ciento, al pasar el dólar Fix, que es el utilizado para el pago de deuda, de una cotización de 12.3480 a 13.8917 pesos.

El tipo de cambio mantiene un elevado nivel de inestabilidad. Después de un regreso fulgurante desde niveles de 14.20 hace una semana, hubo días de estabilidad sobre niveles de 13.30 y al cierre del pasado viernes volvimos a ver una cotización de 13.80 pesos por dólar.

La incertidumbre con respecto al crecimiento y a la crisis en Europa afecta la cotización, por lo que es difícil determinar siquiera en qué dirección será el siguiente movimiento, por lo que es probable que en las siguientes jornadas volvamos a ver niveles incluso superiores a 14 pesos, alertaron los analistas del Grupo Financiero Invex.

Ante las nuevas circunstancias los analistas cambiaron sus estimados de crecimiento para Estados Unidos a 1.3 por ciento en 2011 y 2.2 por ciento en 2012. Para México se fijó 3.8 por ciento en 2011 y 3.1 por ciento para el próximo año. Con esta información, menos favorable, el espacio de retorno para el tipo de cambio se reduce a pesar de que vuelva la tranquilidad en los mercados.