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La Suprema Corte desestimó recurso para salvar la vida del recluso negro

Troy Davis, ejecutado en EU pese a 600 mil peticiones de conmutación

En su último mensaje, agradeció los miles de correos electrónicos de apoyo y solidaridad que recibió

Expiró a las 23:08, hora local; reiteró ser inocente del asesinato en 1989 de un policía blanco en Georgia

 
Periódico La Jornada
Jueves 22 de septiembre de 2011, p. 24

Jackson, Georgia., 21 de septiembre. Troy Davis fue ejecutado esta noche en la prisión cercana a esta ciudad luego de que la Suprema Corte de Justicia de Estados Unidos dio luz verde para que se le aplicara la inyección letal, ignorando los pedidos de clemencia de los premios Nobel de la Paz Jimmy Carter y Desmond Tutu, y más de 600 mil personas en todo el mundo.

En último mensaje, Davis, un negro de 42 años, condenado a la pena capital por el asesinato del policía blanco Mark MacPhail, ocurrido en Savanah, Georgia, en 1989, agradeció los miles de correos electrónicos que recibió de apoyo de todo el planeta, y dijo que eso engrandeció su espíritu durante el último año de su vida.

Davis, quien expiró a las 23:08, hora local clamó su inocencia una vez más por el crimen que se le imputó.

La Suprema Corte decidió horas antes analizar el caso de Davis, al aceptar un recurso presentado por su defensa hora y media antes de la ejecución, prevista inicialmente a las 19 horas.

Nosotros pedimos a la Suprema Corte de Estados Unidos una suspensión, ellos ahora están decidiendo. Hasta que decidan, la cárcel está retrasando la ejecución, informó uno de los abogados defensores de Davis.

No hay una hora límite pero la prisión no puede esperar por siempre, agregó el defensor al referirse al último recurso presentado para salvar a Davis, quien a lo largo de su cautiverio tuvo cuatro fechas de ejecución.

Poco después de que se anunció que la Suprema Corte de Justicia analizaba la situación de Davis, la Casa Blanca informó que el presidente Barack Obama no intervendría pues no quería interferir en asuntos estatales.

A lo largo del día, cientos de manifestantes realizaron protestas y oraciones no sólo a las afueras de la cárcel donde estaba recluido Davis, sino que las movilizaciones se extendieron a todo el país. Una docena de personas fueron detenidas frente a la Casa Blanca.

El reverendo afroestadunidense Al Sharpton, luchador por los derechos civiles, declaró: es un escándalo, no se debe ejecutar a alguien sin pruebas y basándose únicamente en evidencia visual.

La justicia se negó a reabrir la causa pese a que testigos que identificaron a Davis se retractaron de sus afirmaciones y hubo otras irregularidades en la investigación, además de que el arma homicida, jamás fue encontrada, ni ninguna otra evidencia física.

Existen dudas de que los casquillos de bala encontrados en la escena del crimen hayan sido del tiroteo en que perdió la vida el policía, pues días antes hubo un enfrentamiento armado en el lugar.

La muerte de MacPhail ocurrió afuera de un local de Burger King que el uniformado custodiaba. Varios clientes del lugar identificaron a Davis como el agresor de MacPhail, aunque después se retractaron. Varios dijeron haber identificado falsamente al reo bajo coerción de los agentes de la policía que los interrogaron.

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Militantes contra la pena de muerte se manifiestan en la ciudad de Jackson en repudio a la ejecuciónFoto Ap

Miembros del jurado que encontró a Davis culpable de asesinato han dicho que de conocer las irregularidades de la investigación en el momento del juicio, su veredicto hubiera sido de inocencia.

De las personas que dijeron haberlo identificado falsamente, existen dos que afirman haber escuchado la confesión de otro sujeto que sería el verdadero asesino de MacPhail, abatido en un pelea en Savanah, Georgia, en 1989.

El papa Benedicto XVI, el ex jefe de la Oficina Federal de Investigaciones William S. Sessions y la actriz Susan Sarandon figuran entre los personajes que se opusieron a la ejecución de Davis.

La Suprema Corte de Georgia rechazó el último recurso presentado por la defensa del condenado a muerte Troy Davis.

Anneliese MacPhail, madre del policía asesinado, dijo a la cadena CNN que estaba absolutamente devastada cuando se había dado el retraso de último minuto. Reiteró su convicción de que Davis mató a su hijo.

Este caso ha sido revisado en todas las instancias en Georgia, ha ido tres veces a la Corte Suprema y ahora nuevamente lo dilatan, dijo MacPhail desde su casa y tras afirmar que la viuda e hijos del asesinado estaban en la prisión de Jackson esperando la ejecución.

Cientos de personas protestaron hoy frente a las instalaciones de la cárcel de Jackson. Los manifestantes permanecieron esta noche en la cercanía de la prisión, y coreaban consignas solicitando clemencia y pidiendo justicia para Davis hasta el último minuto.

La mayoría los manifestantes vestían camisetas con la imagen del prisionero de 42 años, la mitad de los cuales pasó en el llamado corredor de la muerte.

Imágenes de CNN mostraron a grupos de activistas portando carteles y pancartas en las que se leía: Yo soy Troy Davis o Demasiadas dudas, libérenlo

La Junta de Indultos y Libertad Condicional de Georgia rechazó el pasado martes conmutar la pena de muerte a Davis, pese a los dudosos elementos que certifican su culpabilidad.

También un editorial del diario The New York Times llamó a las autoridades a reconsiderar la pena de muerte en el caso de Davis, antes de cometer un error judicial trágico, según advierten la mayoría de sus defensores.

Ajusticiado en Texas un miembro del Ku Klux Klan

Lawrence Brewer, un estadunidense de 44 años miembro del Ku Klux Klan, fue ejecutado este miércoles en Texas por el asesinato racista del afroamericano James Byrd, anunciaron las autoridades penitenciarias de ese estado del sur de Estados Unidos.

La muerte de Brewer fue confirmada a las 18:21, hora local, dos minutos después de que se aplicó la inyección letal en la prisión de Huntsville. El detenido no hizo declaración alguna antes de su ejecución.