Critica Ruiz Alarcón la falta de confianza plena
en el consejo de administración en el negocio reciente
Nadie sabe a quién se compraron las acciones, en cuánto y a qué acuerdos se llegó en la práctica, lamenta
Jueves 8 de septiembre de 2011, p. 3
La compra de acciones de la española Repsol por Petróleos Mexicanos (Pemex) se realizó con una fuerte carga de opacidad, errores de omisión, insensibilidad y falta de confianza plena
en el consejo de administración o, por lo menos, hacia los consejeros profesionales, afirmó Fluvio Ruiz Alarcón, integrante de ese cuerpo colegiado. Al menos en mi caso eso hace que me sienta incómodo
, declaró a La Jornada.
Las condiciones en que se manejó el aumento de capital en la petrolera ibérica provocó que Ruiz Alarcón, junto con otro de los consejeros profesionales, Héctor Moreira, enviaran ayer una carta al secretario de Energía, José Antonio Meade Kuribreña, presidente del consejo de administración, solicitándole la realización de una junta extraordinaria conforme establecen los estatutos en la fecha que él disponga.
“La crítica que de manera personal asumo es el tiempo que ha transcurrido para darnos a conocer los detalles de la operación. No nos informaron ni como consejo ni como órgano colegiado, al menos a los consejeros profesionales. Nadie sabe en detalle a quién se compraron las acciones, en cuánto, a qué acuerdos se llegó en la práctica, etcétera. Dan la percepción de que llevan a cabo una ‘política de casino’ por la opacidad con la que se han manejado los detalles. Los mexicanos, como propietarios de la empresa, tienen derecho a saber qué pasó; si no hay una respuesta contundente, las críticas generadas por el caso son comprensibles”, dijo.
–¿Cuáles serían las principales críticas, la inversión de unos mil 700 millones de pesos en una empresa con problemas financieros y el supuesto acceso a tecnología que se podría haber adquirido con otro tipo de convenios? –se le preguntó.
–No se trata del manejo de los recursos de la empresa paraestatal. Los problemas financieros de Pemex derivan de los controles y el techo presupuestal a los que se le sujeta. La caja de Pemex cuenta con recursos suficientes para cubrir con recursos propios la totalidad de la operación, sin acudir a los mercados de deuda, pero no se puede hacer por las restricciones a las que se le sujeta.
Respecto del acceso a tecnologías, es comprensible que pretenda aprovechar una inversión que tiene en Repsol desde hace 30 años, darle un giro y dejar de manejarla de manera rentista, sin ser peyorativo, de sólo recibir dividendos sin mayor participación. En este caso yo sostengo que sí pudo haber sido una operación de carácter estratégico.
–El secretario de Energía explicó que se trata de una acción enmarcada en una estrategia de internacionalización
de Pemex. ¿En qué consiste esta estrategia?
–Es un rubro que está planteado en el Plan de Gobierno, pero hasta ahora no se ha desarrollado, aunque ya se realizaron diversos encuentros para estructurarlo y ver de qué manera se puedan aprovechar las oportunidades. Pero por el momento no hay nada definido. Quizás la operación con Repsol se haya enmarcado en esta estrategia, pero no existe un programa específico.