Venecia, 5 de septiembre. El actor británico Gary Oldman tiene premios de todo el mundo, pero nunca ha sido postulado al Óscar.

Hasta ahora. Todo podría cambiar con Tinker, Tailor, Solider, Spy, la película que este lunes fue recibida en el Festival de Venecia con una ovación.

La adaptación cinematográfica que el director sueco Thomas Alfredson ha rodado de la novela de John Le Carré (publicada en España como El topo), respira ese aroma de las películas de espías de los años 70 que ya no se consigue ver en los cines.

Acostumbrados a películas del género con ritmo frenético, tecnología de punta y litros de sangre, la quinta película de Alfredson consigue enganchar al espectador sacando el máximo partido a la compleja trama.

Oldman, cuyo nombre en los años recientes se ha asociado a la saga de Harry Potter y al Batman de Chris Nolan (todavía tiene pendiente de estreno The Dark Knigth Rises), da vida a un miembro solitario y sagaz del servicio secreto.

He interpretado personajes bastante frenéticos que se expresaban de forma emocional y física. Se agradece la oportunidad de hacer algo diferente, señaló el protagonista de Drácula, de Bram Stocker, quien podría figurar en las próximas quinielas de los premios de la Academia de Hollywood por esta soberbia interpretación del anti James Bond.

Su compatriota Colin Firth, ganador del Óscar a mejor actor en la entrega pasada de los premios, también participa en esta producción, pero en un papel menor.

El actor británico a su llegada a la MostraFoto Ap

Aunque existe una serie de televisión británica de finales de los años 70 en la que Alec Guinness daba vida al protagonista que ahora interpreta Oldman, el director sueco (Let the Right One In), que tiene una larga trayectoria en la televisión, comentó que no suele inspirarse en otras películas cuando hace cine, sino más bien en cuadros y en música de diversos tipos.

Llama la atención escuchar al final de la cinta a Julio Iglesias en una versión de la canción francesa La mer. A lo mejor la idea fue del compositor de la banda sonora, el español Alberto Iglesias.

Todos contentos

A pesar de lo atractivas que resultan las novelas de John Le Carre, no siempre tuvieron una feliz adaptación, como fue el caso de El sastre de Panamá. Pero esta vez hasta el propio escritor está contento con el resultado y ha asegurado que hasta el mismo Alec Guinness aplaudiría de pie la interpretación de Oldman.

Tinker, Tailor, Soldier, Spy compite por el León de Oro en Venecia y de las tres películas presentadas hoy a concurso ha sido la más aplaudida. El director estadunidense Todd Solondz estrenó la comedia agridulce Dark Horse, mientras la china Ann Hui presentó A Simple Life.