A poco más de una semana para el inicio del ciclo escolar 2011-2012, profesores y estudiantes normalistas denunciaron que la reforma integral de la educación normal se aplicará sin el conocimiento de las comunidades académicas, pues los docentes que atenderán asignaturas del nuevo plan de estudios desconocen sus contenidos y no sabemos si se han elaborado los nuevos programas de estudio.

Reunidos en el segundo Foro de Análisis Pasado, Presente y Perspectivas de la Educación Normal, convocado en la sección 9 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación, señalaron que las autoridades educativas han asumido una política autoritaria y discriminatoria, pues nos ven como simples instructores que nada tienen que decir en las definiciones curriculares que formarán a miles de maestros de educación básica.

Graciela Gutiérrez, profesora e investigadora de la Benemérita Escuela Nacional de Maestros, afirmó que quienes participaron en el proceso de selección para ingresar a esta casa de estudios y cursar su licenciatura en educación primaria fueron engañados. La convocatoria que se emitió viene con el plan de estudios de 1997 y no con la reforma que pretende implementar, con la que pasa de cuatro a cinco años la duración del programa curricular.

Ante representantes de las normales superiores, de profesores de educación física, prescolar y secundaria en la capital del país, agregó que la comunidad normalista está ausente de la discusión y del diseño del nuevo plan de estudios. Sólo conocemos un mapa curricular que tiene muchos vacíos.

Al respecto, Víctor Manuel Querea, secretario del Trabajo de la sección 18 de Michoacán, demandó la suspensión inmediata de la aplicación de la reforma curricular en las normales en el Distrito Federal, pues no hubo ninguna convocatoria para participar.

Subrayó que no estamos contra una reforma a la educación normalista, pero debe ser resultado del consenso. Está demostrado que una modificación de planes y programas de estudio que no cuenta con el apoyo de profesores y alumnos está condenada al fracaso.

Por ello, aseguraron que los normalistas en todo el país se están organizando escuela por escuela para defender nuestras instituciones y no permitir que un gobierno neoliberal acabe con una profesión que es más necesaria que nunca, ante millones de adolescentes y jóvenes expulsados del sistema educativo nacional.

Con información de César Arellano