Los jóvenes no son una incógnita o un problema frente al cual hay que estar precavidos, sino un elemento fundamental del presente y el futuro, por lo que es necesario que el gobierno garantice recursos suficientes en materia educativa, afirmó el rector de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), José Narro Robles.

Luego de inaugurar la Feria de útiles escolares y cómputo 2011, Narro dijo tener miedo de que una eventual crisis económica afecte a la máxima casa de estudios, por lo que solicitó a la Secretaría de Hacienda y a la Cámara de Diputados que protejan los recursos para la enseñanza superior. También sostuvo que es preocupante que millones de jóvenes a escala global se hayan visto orillados a manifestar su descontento por la exclusión que padecen.

En tanto, en el contexto del Día Internacional de la Juventud, el Centro de Investigación Laboral y Asesoría Sindical (Cilas) lamentó que en México la constante para esta población sea el alto nivel de deserción escolar, la violencia, el desempleo abierto y la precariedad laboral.

Añadió que en el país más de un millón y medio de adolescentes y jóvenes carecen de empleo, quienes representan 57 por ciento del total de desocupados, y sólo uno de cada tres tiene trabajo en el sector formal de la economía.

Agregó que las nuevas generaciones serán las más afectadas por el desmantelamiento de los esquemas laborales dignos, ya que no tendrán seguridad en el empleo y estarán destinadas a saltar de trabajo en trabajo, con contratos temporales, sin tener regímenes de pensiones o jubilaciones; sólo contarán lo que puedan ahorrar individualmente para su retiro. Además, tendrán salarios bajos y carecerán de prestaciones.

Por su parte, el arzobispo de Acapulco, Carlos Garfias Merlos, indicó que ante la vulnerabilidad que muestran los jóvenes ante el crimen organizado, la Iglesia pretende fortalecer el alma juvenil a partir de una experiencia de Dios para que no se dejen seducir por estas actividades.

Señaló que esto tiene la finalidad de que puedan adquirir su identidad y elaboren su proyecto de vida más a partir de los valores del Evangelio, que inspiran positivamente los valores humanos y sociales.

Aseguró que así los jóvenes podrán ser capaces de resistir las tentaciones vinculadas a la violencia, como la búsqueda del dinero fácil y el rechazo al sacrificio, y podrán aportar a la sociedad el compromiso por la construcción de la paz.

El obispo de San Cristóbal de las Casas, Felipe Arizmendi Esquivel, sostuvo que se debe alentar otra juventud, una cimentada en Cristo. Añadió que las expectativas y la actitud de muchos jóvenes no mejorará si no se les da mejor educación para que asuman valores distintos, apegados a la enseñanzas de Jesús.

Asimismo, a pocos días de que comience la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ) 2011, en Madrid –a la cual asistirá el papa Benedicto XVI–, el obispo sostuvo que si sólo se les incita al libertinaje, al placer sin moral, al éxito sin sacrificio, so pretexto de libertad y de que tienen derecho a gozar la vida sin restricciones, los resultados seguirán siendo catastróficos.

Juan Fidel Zorrilla, académico del Instituto de Investigaciones sobre la Universidad y la Educación de la UNAM, indicó que ahora el principal factor de deserción escolar del sector de entre 15 y 19 años es el desinterés por la escuela y la pérdida del gusto por estudiar, aun por encima de cuestiones económicas.

Judith Zubieta, coordinadora de Vinculación Académica de la Secretaría de Desarrollo Institucional de la UNAM, precisó que, en promedio, 73 por ciento de los jóvenes dejan de estudiar a los 18 años o antes. Sostuvo que ante tal situación se debe hacer uso de la creatividad para innovar no sólo en cuestión tecnológica, sino también pedagógicamente para retener a los estudiantes.

Respecto a la JMJ 2017, el director de la Comisión Pastoral Juvenil de la Arquidiócesis de México, el sacerdote Ascensión Plaza Miguel, aclaró que los esfuerzos y el deseo de que la arquidiócesis capitalina participe como sede de la JMJ 2017 corresponden a organizaciones ajenas a esa comisión y a la Dimensión Episcopal Mexicana de Pastoral Juvenil.