Exponen afectaciones que causarían las unidades a edificios
Viernes 5 de agosto de 2011, p. 38
Vecinos y comerciantes del Centro Histórico solicitaron hoy a la Organización de Naciones Unidas para la Educación Ciencia y Cultura (Unesco) su intervención para revocar el paso de la línea 4 del Metrobús que proyecta el Gobierno del Distrito Federal en vialidades de la zona.
Luis Figueroa Solano, del Frente Único de Vecinos y Comerciantes del Centro Histórico, informó que entregaron un documento al organismo internacional en el que se exponen las afectaciones que el medio de transporte ocasionará en el Centro Histórico, nombrado Patrimonio Cultural de la Humanidad en 1987.
Tras una reunión con Ciro Caraballo Perichi, coordinador del sector cultural de la Unesco en México, Figueroa Solano consideró que los vecinos y comerciantes recibirán una respuesta positiva, pues es claro que se destruirá parte del patrimonio cultural de la ciudad, lo que motivará al Comité de Patrimonio Mundial a intervenir, como en el caso de Teotihuacán, cuando se intentó instalar en el recinto equipo para un espectáculo de luz y sonido.
El líder de vecinos hizo un llamado al jefe de Gobierno, Marcelo Ebrard, para que lleve a cabo una verdadera consulta ciudadana
y retome el proyecto original que tenía el GDF para que este medio de transporte corra por Eje 1 y se evite así el paso de estas unidades de 18 toneladas por las calles estrechas del Centro
.
Se quejó además de que en la reunión con representantes de la Unesco no estuvieron presentes representantes del Fideicomiso del Centro Histórico y del Instituto Nacional de Antropología e Historia, quienes fueron invitados por los afectados por la obra.
Luego de la reunión con el representante de la Unesco, los opositores denunciaron que en la calle Juan Cuamatzin, en la zona de La Merced, los trabajadores de la obra de la línea de transporte encontraron el martes pasado vestigios arqueológicos
al hacer excavaciones de más de 80 centímetros, cuando el INAH indica que sólo pueden ser de 30.
En tanto, en Donato Guerra y Abraham González, donde la madrugada de este jueves comenzaron las obras de construcción de uno de los tramos de la línea 4 del Metrobús, hubo dos fugas de agua que fueron reparadas casi siete horas después de que fueron reportadas por los vecinos.