Al encabezar el homenaje a los héroes de la Independencia, el presidente Felipe Calderón llamó a trabajar unidos para construir un México más seguro y justo, donde las familias vivan en paz y sólo el vicio o la virtud distingan a un mexicano de otro, como lo plasmó José Mario Morelos en los Sentimientos de la Nación.

En la columna de la Independencia, pidió unir esfuerzos para consolidar una democracia cada vez más fuerte, más representativa y sensible ante las ingentes demandas de la sociedad.

Nuestros héroes nos enseñaron que no hay imposibles cuando la voluntad de los mexicanos se une. La unidad de los mexicanos nos hará prevalecer ante cualquier enemigo y adversidad. La unidad es la mayor divisa para que México salga, siempre, triunfante ante cualquier desafío, subrayó ante los restos de 14 caudillos patrios que ayer fueron trasladados al mausoleo de la columna de Independencia, luego de permanecer 11 meses en exhibición en Palacio Nacional, y de recibir tratamiento para su conservación.

Como representante del Poder Legislativo, el presidente de la Cámara de Diputados, Jorge Carlos Ramírez Marín, coincidió con Calderón en llamar a la unidad, tras convocar a impulsar una agenda única, asumir los compromisos que hoy tenemos miedo de asumir y hacer una nueva independencia que rompa las nuevas formas de esclavitud.

Recordó que, en 200 años, los mexicanos han batallado por construir la nación, pero, al mismo tiempo, se han afanado en ser los artífices del obstáculo, jugando de manera peligrosa, acercándonos a un punto en el que pudiéramos no tener retorno.

En tono similar, el presidente del Senado, Manlio Fabio Beltrones, pidió reconocer que las reformas legislativas son inaplazables, porque en la medida en que no se realicen, el deterioro social podría ser mayor y podríamos haber perdido la oportunidad de emprenderlas en un clima propicio, sin alteraciones que lleven a medidas desesperadas ante situaciones imprevistas.

La ceremonia de homenaje a los caudillos se realizó luego de que sus restos salieron de Palacio Nacional, y fueron colocados en vehículos militares para regresar a la columna de la Independencia, donde decenas de personas los recibió con una lluvia de claveles blancos.

De esta manera, las osamentas de Miguel Hidalgo, José María Morelos y Pavón, Ignacio Allende, Juan Aldama, Nicolás Bravo, Xavier Mina, Guadalupe Victoria, Vicente Guerrero, Mariano Matamoros, Leona Vicario, Andrés Quintana Roo, Mariano Jiménez, Pedro Moreno y Víctor Rosales iniciaron, a las 8:30 de la mañana, el recorrido de retorno a su morada. A lo largo del trayecto por calles del centro de la ciudad de México y Paseo de la Reforma, fueron custodiadas por jóvenes del Heroico Colegio Militar.

En el monumento a la Independencia, donde se dispuso un operativo de seguridad que impedía el acceso a los transeúntes, el presidente Felipe Calderón, Beltrones, Ramírez Marín y los secretarios de Marina, Mariano Saynez, y de la Defensa, Guillermo Galván, así como Jesús Castillo, jefe del Estado Mayor Presidencial, hicieron una guardia de honor frente a las urnas, mientras los cadetes del Colegio Militar disparaban una salva de fusilería.

El jefe del Ejecutivo señaló que los héroes de la Independencia lucharon incansablemente por la libertad, y que ahora toca a la generación del Bicentenario preservar dicha conquista. Combatieron por darle a México nuevas instituciones, y a nosotros nos toca preservar y transformar esas instituciones, para que sirvan precisamente al propósito de justicia, equidad, igualdad, representatividad y democracia, añadió

Dijo que el mejor homenaje a los caudillos de la Independencia, a dos siglos de la gesta, es retomar su espíritu de cambio; ser visionarios y generosos para hacer prevalecer el interés nacional sobre cualquier otro de índole personal o de corto plazo.