Expertos de Harvard presentaron en París los resultados de un sondeo realizado en 5 países
Muchas personas señalan que se someterían a un estudio aun sin tener síntomas y harían lo mismo con sus seres amados
Los resultados reflejan la preocupación por el incremento de enfermos, dicen
Jueves 21 de julio de 2011, p. 2
París, 20 de julio. El Alzheimer es la enfermedad más temida después del cáncer y muchas personas señalan que se someterían a análisis o harían que un ser amado se evaluara incluso sin tener síntomas, informaron el miércoles investigadores estadunidenses y europeos.
Estos resultados, presentados en la Conferencia Internacional de la Asociación de Alzheimer en París, reflejan la preocupación general por el creciente número de personas que padece la forma más común de demencia. El Alzheimer actualmente afecta a casi 36 millones de personas en el mundo.
Estudios recientes sugieren que la enfermedad comienza a desarrollarse al menos una década antes de que aparezcan los síntomas y muchos creen que los controles previos desempeñarían un papel clave en lo que hace al tratamiento de los pacientes y la preparación de sus familias sobre la carga por venir.
Expertos de la Escuela de Salud Pública de Harvard hicieron un sondeo telefónico a más de 2 mil 678 mayores de 18 años en Estados Unidos, Francia, Alemania, España y Polonia, con fondos de Bayer AG, que desarrolla una prueba por imágenes para detectar signos tempranos de la enfermedad.
El equipo halló que más de 85 por ciento de las personas que respondieron la encuesta indicó que verían a un médico si tuviesen síntomas de confusión y pérdida de memoria, y más de 94 por ciento dijeron que querrían lo mismo para un miembro de su familia.
Cuando se les pidió que identificaran el padecimiento más temido en una lista de siete –que incluía el cáncer, la enfermedad cardiaca y el accidente cerebrovascular–, casi una de cada cuatro de las personas entrevistadas de cuatro de los cinco países dijeron que a lo que más tenían miedo era a tener Alzheimer.
Muchos participantes del sondeo dijeron conocer o haber conocido a alguien con Alzheimer: 72 por ciento de los franceses, 73 de los alemanes, 77 de los españoles, 73 de los estadunidenses y 54 por ciento de los polacos.
Asimismo, cerca de tres de cada 10 encuestados dijeron tener un familiar con esa enfermedad neurodegenerativa.
Pese a los altos niveles de ansiedad registrados en el estudio, 40 por ciento de los encuestados dijeron no saber que el Alzheimer es un padecimiento, y muchos indicaron que creían que existían tratamientos efectivos para desacelerar el avance del mal.
Los medicamentos actuales sólo tratan los síntomas del padecimiento, pero ninguno ha demostrado demorar el avance de la enfermedad, que quita lentamente a las víctimas su capacidad de pensar y cuidar de sí mismas.
Casi la mitad de las personas que participaron del sondeo creen que hay un examen médico confiable que pueda determinar si una persona que padece confusión y pérdida de memoria atraviesa la etapa inicial de la enfermedad de Alzheimer.
Incluso las personas saludables sin síntomas están interesadas en evaluarse: alrededor de dos tercios de los entrevistados dijeron que se someterían a un examen para ver si son propensos a desarrollar la enfermedad.
Una cantidad muy importante de personas parecen querer saber si corren riesgo significativo, incluso sin tener síntomas
, dijo uno de los autores del sondeo.
Aunque compañías como Eli Lilly, General Electric y Bayer están cerca de crear una prueba por imágenes que pueda detectar signos tempranos de Alzheimer en el cerebro, por el momento no existen exámenes médicos confiables que permitan hacerlo.